Me costó horrores convencerle de que se fuese a su cuarto, pero logré conseguirlo. Rachel había estado merodeando por el pasillo tal y como Gemma nos había dicho, y aunque era una situación demasiado violenta, tuvimos que esperar a que la zona estuviese despejada para que pudiese salir. Antes de irse me propinó unos cuantos besos. Aquella electricidad no desaparecía ni a tiros, antes pensaba que era solo cosa mía, pero al estar juntos de aquella forma estaba claro que él también lo sentía. Me metí al cuarto de baño con el cuerpo ardiendo en fiebre. Nunca me había pasado nada igual, ni fisica, ni emocionalmente. Había entrado en la sexualidad de una forma demasiado desagradable, pero aquello era distinto. Su forma de tocarme y hacerme sentir segura, lograba que todos los malos recuerdos se esfumasen.
Me desnudé completamente y me metí en la ducha, pegué mi cuerpo enrojecido a la pared y dejé que el agua templada me cayese por el cuerpo. Froté con ambas palmas mis brazos y aún podía sentir como me estremecía. Tenía cada trocito de piel electrizado. Tardé en ducharme más de lo normal para mis costumbres, y al salir al cuarto para elegir la ropa, tardé aún más. Lo que tenía claro era que el pelo debía ir suelto y muy pegado al cuello. Si alguien me veía aquella cosa, a saber lo que se pensaba y no estaba dispuesta a admitir que había estado con Harry. No por verguenza hacia él, pero era demasiado chocante que después de estar como perro y el gato terminasemos así, y más cuando Rachel le seguía cual perrito faldero. El solo pensamiento hizo que me castañearan los dientes. De todas formas no quería ilusionarme o darle un sentido más profundo al asunto. Aquello no iba a volver a suceder por tres motivos.
El primero, Harry seguramente no era de enamorarse de nadie que no fuese él mismo y la chica de turno que le rondase. Dos, no pensaba ser su juguete. Y tres, implicarme emocionalmente solo me serviría como dolor de cabeza por que entre otras cosas nuestros caminos terminarían separados. Fuera como fuese, decidí convencerme a mi misma que aquello era algo en lo que no debía pensar. Me senté en la cama con la ropa interior, mirando las bolsas. En una de ellas encontré algo negro que desconocía. Tiré de ello y entonces caí en la cuenta de que se trataba de su camiseta. Cuando había llegado Gemma, la había dejado ahí, eso y su libreta. Rebusqué en la bolsa, sacando todo y amontonandolo en la cama, entonces la vi. Pequeña y con la solapa de color marrón, abrí la primera página y no me encontré nada. Arqueé una ceja y empecé a pasarlas rápidamente, entonces mis ojos captaron algo. En mitad de aquella pequeña libreta, había un dibujo en una pagina. Era una chica, una chica con los ojos cerrados y el cabello descolocado, estaba dibujada con ligeros trazos de tinta negra y abajo en una letra de lo más clara, ponía Little things. La curiosidad me invadió pero sabía que esa libreta debía volver a su dueño.
Tras estar debatiendo que ponerme durante alrededor de quince minutos, opté por ponerme un vestido azul marino con rayas blancas y unas manoletinas de color blanco. Allí el ambiente era caluroso y incluso la pegajosidad se palpaba. Me acerqué al espejo y tras colocarme estrategicamente el pelo, procedí a maquillarme. Nunca lo había echo pero las instrucciones de Gemma eran sencilla. Raya y pintalabios. Asique delineé mis ojos con un pincel negro y me pinté los labios de un intenso color rojo. Una vez arreglada salí al pasillo. Miré fijamente la puerta de Harry y empecé a sentir como una fuerza magnetica me empujaba hacia ella, apreté su agenda contra la mano y decidí que era mejor pasar de largo. Caminé hasta la puerta de Gemma y allí habia una nota pegada con celo, donde expresamente me decía que me bajase yo sola a desayunar. Suspiré y sonreí mientras negaba con la cabeza, lo suyo con Niall debía de haberse alargado, y no les culpaba. Me di la vuelta y miré las escaleras, miré de frente y vi el ascensor. No sabía por que opción decantarme, si ir a lo seguro o bajar más rapido y arriesgarme. Finalmente me metí en el ascensor.
Al hacerlo, miré los botones y pulsé la primera planta. Justo cuando la puerta se estaba cerrando, una mano la paró en seco. La garganta se me resecó al ver de quien se trataba. Llevaba puestos unos vaqueros de pitillo negros, una camiseta con estampado de brujulas, y el pelo ligeramente humedo, cayendole por la frente de forma gracil. Me miró y sus hoyuelos se hundieron. No supe como reaccionar y lo más inteligente fue apoyarme en la pared del fondo. Bien Anna, bien. Gritó mi vocecita interna. Harry me observó y finalmente entró en el ascensor. Iba a acercarse a mi, cuando una señora mayor también se metió dentro. Eso debió frenar en seco sus intenciones.
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Be as a famous I || Haylor fanfic (harry styles and taylor swift) (1 parte Completa)
Fiksi Penggemar-No me beses.-Aquello salió en forma de murmullo. Entonces justo lo que le pedí que no hiciese, fue lo que hizo. Traté de quitármelo de encima, pero contra más luchaba más caía. Me besó la frente, la mejilla, el cuello hasta que finalmente atrapó su...