CHAQUETAS Y PANTALONES DE CUERO

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Yoongi veía como así como las estaciones pasaban y con ellas se iba el tiempo, gran enemigo

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Yoongi veía como así como las estaciones pasaban y con ellas se iba el tiempo, gran enemigo.

Parecía que cada vez aprendía a ir a más rápido, algunas cosas seguían igual, pero habían otras que simplemente no pasaban aún con el cambio de las estaciones.

Como lo era su amor por Jimin, ese no disminuía, seguía allí tan intacto y tan fuerte como hace tantos años. Como cuando por fin supo lo que era querer a alguien más allá de el afecto que no involucraba lo romántico.

Pero Jimin sí, él había cambiado, habían sido dos años desde que su relación con Jimin parecía se había vuelto tan distante, a pesar de vivir en la misma casa, sus conversaciones no iban más allá de un "hola" "¿Cómo estás?" "Adiós", sólo así, ya no iban a juntos de camino a casa, Jimin había hecho muchos amigos conforme fue creciendo.

Yoongi lo observaba reír, con dieciséis años Jimin podía ser el sueño romántico y húmedo de muchos, su transición de niño fue grande, sus rasgos se hicieron más finos resaltando que era un doncel, su cabello rubio parecía que se veía más dorado, como si tuviese en su cabeza los rayos del sol, su cuerpo había dejado de ser el de un niño, ahora tenía largas piernas y esbeltas, caderas anchas, una cintura pequeña y un trasero redondo, su piel parecía ser más suave y atrayente, en su rostro sus ojos color miel habían cobrado un brillo excepcional y sus labios parecían más gruesos, más cuando los pintaba en rosa gloss, Yoongi podía quedarse horas y horas viéndolo, pero lo lastimaba que ahora las sonrisas de Jimin no fueran para él.

Apartó la vista. Él tenía dieciocho años, estaba en una edad donde tenía ganas de tantas cosas y le avergonzaba pensar en hacerlas con Jimin, reprimía los deseos que querían salir de él, pero de nuevo, podría por fin hacer caso a su amigo Namjoon y decirle a Jimin, aunque allí estaba su miedo, miedo a destruir la confianza que le había dado la familia Park al querer decir sus sentimientos.

Yoongi habría jurado que olvidaría a Jimin en este tiempo. Sin embargo, su amor hacia el rubio sólo había crecido más, sus pensamientos fueron sacados de sí cuando escuchó el sonido de la voz con  molestia de Jimin, lo vio que discutía con un chico, se levantó de donde estaba lentamente, para acercarse, Yoongi sólo tenía ese año en el colegio, después iría a la universidad, para después irse, Jimin se vía muy molesto y el otro chico quería tomarlo a la fuerza.

Yoongi camino hasta ellos y se aclaró la garganta, sabía que no era el tipo más alto, pero media uno setenta y cinco, Jimin media uno sesenta y siete, el chico que lo molestaba estaba por unos cinco centímetros menos de Yoongi.

— ¿Ocurre algo? — preguntó Yoongi, había aprendido a usar su voz con el paso de los años cuando está se volvió más ronca y grave, podría no ser musculoso, pero tenía algo de cuerpo y no sé dejaba intimidar

— Nada que te importe — respondió el chico, aunque había algo de vacilación en su voz

— Me importa si veo que estás molestando a Jimin — por supuesto que le importaba, quizás su relación con Jimin era casi nula, pero no dejaba de importarle

The Sugar Fairy - Yoonmin  ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora