One-shots: Romance en la Mazmorra

Tiona: Un Héroe, Mi Héroe

¿Qué es un Héroe?

Una pregunta simple que seguramente cualquier persona al azar en la calle podría contestarte. Sin embargo, una pregunta a la que cada una de estas personas podría dar una respuesta diferente.

Porque la definición de un héroe, aunque tan clara como el cristal para todo el mundo, era a su vez tan difusa como la niebla de la mañana.

¿Era un héroe ese que salvaba a la princesa en peligro?

¿Era un héroe ese que dio alimento a los necesitados?

¿Era un héroe ese que dio la vida por su pareja?

¿Era un héroe ese que dio su vida en la guerra?

¿Era un héroe ese médico que salvo la vida de un paciente?

¿O acaso es que todos y cada uno de ellos son héroes?

Héroe, es una palabra tan vasta y sin embargo pocos se dan cuenta del profundo significado de esta misma.

Un significado tan profundo que parecería imposible de comprender, incluso cuando este mismo está enfrente de nuestras narices.

Por qué solo se necesita una palabra para describir a un Héroe, después de todo, esa palabra es lo que representan los héroes a los ojos del mundo, o por lo menos, era la palabra que representaba a los héroes a los ojos de Tiona Hiryute.

Siendo esta palabra "Esperanza"

¿Pues no era que la princesa se llenaba de esperanza al ver al héroe?

¿Pues no era que los necesitados veían esperanza en la amabilidad de su héroe?

¿Pues no era que esa pareja siempre recordaría a esa persona que le dio más esperanza a su vida?

¿Pues no era que esos soldados valientes deban esperanza a su pueblo?

¿Pues no era que ese médico le daba esperanzas a su paciente?

La esperanza que traían consigo los héroes era lo que los caracterizaba, porque cuando más los necesitaran allí estarían para mostrar la luz en la oscuridad.

Tal y como le mostraron la luz cuando ella lo necesitaba, tal y como le dieron esperanza cuando no la tenía, tal y como la dejaron sonreír cuando no podía.

Tiona nunca había olvidado esos momentos de oscuridad en lo que vivía, nunca olvidaría sus primeros años de vida, nunca olvidaría sus años en Telskyura.

Pero tal y como no olvidara la oscuridad que la acompaño en esos momentos, ella nunca olvidaría la luz que la saco de ese tormento.

Ella nunca olvidaría la historia de su primer Héroe.

Nunca olvidaría el libro que le abrió las puertas a un nuevo mundo que no creía posible en esos momentos.

El libro que narraba la historia del Argonauta.

Un libro de héroes que era más que nada una comedia, una obra que hacia reír al lector a carcajadas mientras la leía. No era una obra donde su protagonista fuera parecido a un héroe en realidad, pues no por nada lo llamaban payaso en su vida. Sin embargo, Tiona podía decir con seguridad que él era un Héroe.

Él era su Héroe, pero no solo suyo, pues aunque no se notara a lo largo de las líneas en la obra, aunque sus acciones parecían insignificantes a comparación a las de otros héroes, el mantenía ese rasgo que los caracterizaba, él era una fuente de esperanza.

Porque cuando el, un payaso que solo sabía hacer reír a los demás, se levantó como un héroe que luchaba contra sus enemigos, hizo que los demás pensaran; ¿Si él pudo conseguirlo como yo no podría?