ʜᴇᴀʀᴛʙᴇᴀᴛs ᴏғ ᴀɴ ᴀɴɢᴇʟ; ʜᴡᴀɴɢ ʜʏᴜɴᴊɪɴ

ϙᴜɪɴᴄᴇ

ᴀɴɢᴇʟ

ᴄᴏʀᴇᴀ ᴅᴇʟ sᴜʀ.

— Oh... diablos.

Ambos nos separamos en cuanto escuchamos su voz y la sorpresa que había en ella. Miramos a la entrada y ahí estaba Jisung viéndonos con asombro, y luego apareció Seungmin quien parecía preocupado.

— Te dije que no vinieras, que ellos tenían cosas que hablar.— se quejó el más alto, dándole un leve golpe en la cabeza a Han, quien justo al instante se quejó.

— ¡Solo quería avisarles que la comida ya estaba aquí!— alzó sus manos como defensa — Dios, si así hablan sobre "cosas"— hizo comillas con sus dedos — Yo también quiero hablar cosas contigo, Minseo— rió burlón, pero yo solo agaché la cabeza.

— En fin— alargó la frase con frustración y rodó sus ojos haciéndome reír levemente —  La comida ya está, por si quieren ir a comer.— tomó la manga de la blusa de Jisung y se lo llevó prácticamente arrastrando.

Aclaré mi garganta y entonces el chico a mi lado rió con ternura. Lo miré por unos segundos, pero cuando sentí mis mejillas arder, retiré mi vista de manera rápida.

— Entonces ¿eso fue un sí a una oportunidad?— susurró haciendo que lo volviese a mirar. Nuestras miradas estaban fijas al otro y cuando le sonreí, este lo hizo también — Gracias, Min.— su tono de voz fue tan dulce que me hizo sentir una revolución en el estómago.

— Deberíamos de ir a comer.— argumenté una vez que el silencio entre ambos se había hecho presente. Caminamos hacia la salida y con solo ver las miradas fijas de los chicos, supe que el responsable era Jisung.

Lo miré seriamente y este mantenía una sonrisa sospechosa que me hizo fruncir el ceño para él — ¡Fue inevitable! Algún día tenían que contarlo ¿o no?— se defendió con una risa de por medio. Los chicos simplemente reían sin creerlo y yo continué caminando hasta encontrar un lugar en aquel gran sofá.

— ¿Ya son pareja?— preguntó Jeongin con emoción en su voz. Parecía un fanático del shipp entre Minho y yo — Se ven lindos juntos.— volvió a hablar sin esperar respuesta anteriormente.

— Lo somos— respondió Minho — Fue inesperado en realidad. Quiero decir, hace poco le dije a Minseo que deberíamos de distanciarnos, no trataba de jugar con sentimientos pero tampoco quería hacerla sentir incómoda.— me miró por unos segundos mientras se sentaba a unos asientos lejos de mí.

— Era evidente que ella gustaba de ti. Solo bastaba con mirarlos con atención y darse cuenta de sus miradas.— habló Seungmin mientras abría la comida, dejando la atención completa en ella.

Sonreí levemente mientras veía toda la comida. Tal vez ellos pensaran que estaba así porque amaba comer más que nada, pero esta vez no tenía nada que ver.
Me sentía feliz por mí. Era como haber dado el paso que necesitaba desde hace unos días y el que justo Minho y yo comenzaramos a salir hoy, fue la mejor sensación hasta el momento.

— Deberías de dejar de involucrarte con otras chicas ahora que estás con Minnie— volvió a hablar el pelirrojo de Seungmin — Sabemos que era un estúpido hobby el tener una novia distinta cada semana, pero ella es nuestra mejor amiga. Lo comprendes ¿no?— alzó su vista y lo miró con tanta seriedad que a todos nos había tomado por sorpresa.

Minho asintió enseguida — Lo tengo muy claro. Minseo siempre ha estado a mi lado, por algo sé cuales son mis límites cuando se trata de ella— me miró — Nunca te dañaría ¿lo sabes?— asentí con una sonrisa pequeña.

Otro silencio más, pero por lo hablado apenas, podría decirse que se sentía algo incómodo el ambiente.
Después de haber comido estuvimos jugando un rato juntos, incluso Seungmin se tomó la molestia de verificar si el tobillo de Han estaba mejor, y su respuesta fue un simple "luce bien".

Cuando cada uno debía regresar a sus casas, porque no es como que la escuela no nos deje obligaciones a montón de un día para el otro. Yo recordé que quedé de ver a Hyunjin esta tarde para pasarle los apuntes del día de hoy.
Tomé mis cosas y agradecí que la lluvia había parado, porque pensaba ir caminando debido a que la ubicación del hogar del rubio estaba cerca.

Me despedí en general de Jisung, Felix y Minho, ya que el resto ya se había ido. Salí por la puerta principal y tomé el paraguas que regresaría mañana a la escuela, porque al parecer a Seungmin se le había olvidado.

Miré a mi alrededor antes de comenzar a caminar, pero escuché a Minho llamarme a mis espaldas. Me detuve para mirarlo completamente y noté como trotó hasta donde yo estaba.

— ¿Vas a tu casa o tienes otro destino antes?— tomaba con fuerza las cuerdas que colgaban de su mochila — Tal vez podría acompañarte ¿no lo crees? El otro día me fui temprano y no pudimos terminar de ver la serie que comenzamos hace más de dos semanas.— rió. Su risa era contagiosa y dulce.

Sonreí — Tengo que ver a Hyunjin.— fui sincera porque no pensaba que fuera algo malo. Después de todo, eran cosas de la escuela y el rubio era ahora nuestro amigo.

— Oh— sus labios hicieron aquella expresión de sorpresa pero terminó por mostrar una pequeña sonrisa — De acuerdo, pero ¿todo bien con él? ¿Se siente mal o algo?— soltó una risa nasal sin dejarme responder — Desearía ir otra vez en la misma escuela que tú, pero bueno, ya sabes como son las cosas.— soltó levemente sus hombros acompañado de un suspiro.

Asentí sonriendo por su expresión — Te entiendo, Minho— hice una corta pausa — Hyunjin faltó porque quería descansar y como él va en mi misma clase, le prestaré mis apuntes. Eso es todo.— decía firmemente para que no pensara que se trataba de una excusa, pero con solo ver sus ojos sabía que no intentaba juzgarme para nada.

— Bien. Ten mucho cuidado de regreso a casa. El clima de hoy nubló un poco el cielo— alzó su vista y yo lo copié por unos segundos — Te quiero, Min.— susurró aún viendo hacia arriba, por lo que enseguida bajé la vista para mirarlo a él.

Sonreí felizmente — Yo también te quiero.— susurré y este me miró con una sonrisa igual que la mía.

— En fin— suspiró con algo de timidez — Te dejo. Nos vemos mañana si se puede ¿de acuerdo?— asentí — Adiós.— se inclinó y besó mi frente como última despedida para después verlo trotar camino abajo. Supuse que iría a la estación de autobuses como siempre.

No podía apartar mi vista de él y encima mi sonrisa en el rostro no ayudaba a calmar los latidos acelerados de mi corazón. De no ser porque mi celular sonó y miré la pantalla para notar que se trataba de un mensaje de Hyunjin.

Hyunjin
Salí a comprar unas cosas a una tienda de conveniencia. Si ya vienes para acá, podría ser que me tope contigo.

No le contesté y me encaminé velozmente en la misma dirección a la que iba hace un rato cuando recién salía de la casa de Han Jisung.