sᴇᴛᴇɴᴛᴀ ʏ ᴜɴᴏ

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*No hace falta ni decirlo, pero sino les gusta este tipo de escenas (+18) pueden pasar de largo

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*No hace falta ni decirlo, pero sino les gusta este tipo de escenas (+18) pueden pasar de largo. (Aclaro que yo no soy muy específica al narrar este tipo de cosas)

 (Aclaro que yo no soy muy específica al narrar este tipo de cosas)

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ᴄᴏʀᴇᴀ ᴅᴇʟ sᴜʀ.

HyunJin

Habíamos cenado comida que pedimos a domicilio y le conté todo sobre lo que HaRin me dijo esta tarde, también vimos un rato la televisión, para al final ir al cuarto y bañarnos.

Yo estaba en el escritorio dibujando un poco, lo cual se trataba de una de las tareas que ya tenía pendientes desde hace unos días, mientras que Min estaba sentada en la cama leyendo un manga que había tomado prestado de su trabajo.

La miré atentamente.
Lucía tan malditamente perfecta, que yo no podría cansarme de admirarla y sentir como mi corazón anhelaba vivir a su lado hasta que yo muriese.

Su cabello aún húmedo por la ducha, su piel tan linda debido al skincare que usamos ambos.
Esa camiseta que es mía, pero le queda lo suficientemente grande para usarla de pijama, y eso básicamente la hacía mucho más atractiva para mí.

Min alzó su vista y me cachó observándola. Rió aún sosteniendo aquel manga — ¿Qué sucede?— me encogí de hombros para entonces levantarme de mi asiento y acercarme a ella — ¿Terminaste tus dibu-

Justo cuando llegué a su lado en aquella cama, le di un pequeño beso, evitando así que siguiera hablando.
Ella sonrió feliz, y entonces dejó el manga en la mesita de al lado para colocar sus manos en mis mejillas y ahora ella besarme.

En un parpadear de ojos, esto se había convertido en un tipo de guerra para ver quien repartía más besos al otro.
Ahora yo estaba sentado en mi lado de la cama, pero igual no dejaba de besarla, como si fuese una adicción y yo ni siquiera quería alejarme ni un minuto.

Minseo suspiraba cada que nos separábamos por unos segundos. Sus manos estaban acariciando mi cabello y mentiría si dijera que me desagradaba, porque la verdad me encantaba cuando hacía eso.

Pasé una de mis manos por una de sus piernas, haciendo que ella soltara un pequeño jadeo.
Entonces subí lentamente mi mano hasta pasarla incluso debajo de la camiseta que ella llevaba.

Segundos después yo ya me encontraba sobre Min, colocando cada una de mis piernas a cada lado de su cuerpo, pero sin parar de repartir besos en sus labios y ahora cuello también.

Ella en cambio, con sus pequeñas manos, buscó la orilla de mi camiseta y la comenzó a levantar, y yo la ayudé, levantando mis brazos para que ella pudiese hacer el resto.

— Te has estado ejercitando mucho y no me doy cuenta.— su voz estaba entrecortada y yo reí al escucharla decir aquello.

Sin darme cuenta, mi voz estaba más ronca de lo habitual, como cuando recién me levantaba por las mañanas — Dices eso como sino me vieras sin camisa y en esta posición, al menos dos veces por semana.— Min sonrió y sus mejillas se sonrojaron tanto, que no pude evitar reír de lo tierna que lucía.

Me sorprendió todo cuando de repente Min me empujó y ahora ella era la que estaba encima de mí.
Sonreí cuando la vi ahí encima y ella simplemente me miraba de una manera tan dulce.

Yo solo pensaba en que no quería que este momento acabara, más bien, ninguno de nuestros momentos como estos. Ahora yo alcé su camiseta, lo cual ella no reprochó porque alzó sus brazos y sonrió cuando ya estaba sin aquella prenda puesta.

Lo siguiente se trató de un sin fin de besos aún ella sobre mí, pero no bastó para que en un minuto, ella volviera a la posición de en un inicio, solo que a diferencia de antes, ahora sus piernas eran las que estaban una a cada lado de mi cuerpo.

No hace falta aclarar que ahora no había prenda alguna que nos estorbase. Ni siquiera necesitábamos palabras para explicar lo perfecto que la estábamos pasando, y era claro porque tenía los labios de Min muy cerca de mi oído, por lo que podía escuchar sus jadeos y gemidos, y de vez en cuando mi nombre pronunciado con suavidad.







Minseo

Podía escuchar los latidos de su corazón.
Yo tenía mi cabeza recostada en su pecho por lo que era fácil sentir lo tibia que estaba su piel todavía.

HyunJin acariciaba mi cabello con una mano y con la otra mi espalda descubierta.
Lo único que nos tapaba era aquella sábana sobre nuestros cuerpos aún sin algo de ropa.

Pensé en levantarme y ducharme antes de poder irnos a dormir, porque después de todo llevábamos más de diez minutos sin decir absolutamente nada, cosa que no me incomodaba, pero la verdad es que HyunJin muchas veces me mantenía cansada después de esos íntimos momentos.

Me moví un poco pero entonces él habló — ¿Puedo preguntarte algo?— alcé mi cabeza y asentí cuando me encontré con sus ojos — ¿Algún día formaremos una familia los dos juntos?

Aunque me sorprendía su pregunta, podía encajar todo con su intriga. Los dibujos de nosotros con niños de por medio, sus notitas con frases que muchas veces tomábamos a broma — Claro que sí HyunJin.— terminé por decir con una sonrisa pequeña. Después de tanto tiempo estando en un relación con este magnífico chico, me di cuenta de que a esto era a lo que llamaban una "relación estable".

El rubio también sonrió — Sé que aún somos algo jóvenes, me atrevería a decir que no tanto en realidad, pero...— asentí para que prosiguiera — Cuando acabemos la universidad, me gustaría profundizar nuestra relación hasta un punto en el que no exista nadie más que nosotros dos enamorándonos cada día más.

Mis lágrimas contenidas en mis ojos hicieron que sonriera felizmente. Muchas veces HyunJin decía tantas cosas lindas que no solía sorprenderme, pero esto era diferente. Se trataba de su futuro y de como él quería que yo fuese parte de él.

— Te amo HyunJin.— susurré para después besar castamente sus labios.

Él rió tímido como si de repente la inocencia que había perdido hace un rato, hubiese cambiado de repente y volviese a ser el de antes — Bien— se estiró un poco — Vamos a tomar una ducha. Te conozco y sé lo mucho que te cansas después de...— alzó las cejas repetidas veces con una sonrisa burlona.

Solté una carcajada ante su gesto.

ʜᴇᴀʀᴛʙᴇᴀᴛs ᴏғ ᴀɴ ᴀɴɢᴇʟ; ʜᴡᴀɴɢ ʜʏᴜɴᴊɪɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora