eras una chica nueva en la escuela de hechicería en la prefectura de tokyo, por lo tanto era sumamente obvio lo nerviosa que te encontrabas por ello, no sabías cómo serían tus compañeros, si tendrías buenos profesores o si lograrías desempeñar bien tu papel de hechicera, cabe resaltar que desde pequeña lograbas ver entes malignas, en un principio tu familia lo miraba extraño pero con el paso de los años al ir investigando por tu cuenta descubriste algunas reliquias antiguas con hechizos muy fáciles de ejecutar o al menos lo eran para ti, el tuyo consistía en decir una serie de números mientras empuñabas una katana lograba sacar tu energía maldita acompañada de una cubierta de rayo a lo largo de la misma que lograba acabar con maldiciones de hasta segundo grado, fuiste descubierta nada más y nada menos que por gojo satoru.
finalmente estabas a la entrada de aquella escuela, no había en si mucha gente esperándote sin embargo de espaldas se encontraba un cautivador chico, se veía muy alto, portando el característico uniforme con sus manos en los bolsillos del mismo, al escuchar algunos pasos detrás suyo volteó quedando frente a frente, para algunos podría haber pasado uno o dos segundos pero entre ustedes pareció una fascinante eternidad, te habías perdido en la galaxia que te otorgaba ese azul oscuro en su mirada, el más mínimo gesto que el expresaba era totalmente artístico, las palabras desaparecían de tu boca; el por su parte no entendía qué pasaba pero estaba encantado por el aura de tranquilidad y paz que te rodeaba, agregando esa belleza tan sublime que solo una chica como tú podía poseer, ¿será que aquello podía ser el comienzo de una conexión más allá de lo físico?
luego de salir del pequeño trance, lograste juntar un tanto de seguridad y te presentaste sin titubear ante el joven junto con otros cuantos más que estaban a su alrededor.
— me llamo (t/n) (t/a), es un gusto conocerte, bueno conocerlos a todos los que están aquí. —una sonrisa aparecía de tu parte para todos los presentes, a lo cual el hombre frente a ti asentía a tus palabras.
— mucho gusto, yo soy fushiguro megumi, bienvenida a la escuela de hechicería, espero que sea de tu agrado tu estancia aquí. —murmuraba en voz baja o apenas audible para ti evitando las burlas de sus demás amigos ya que no solía ser tan expresivo con los recién llegados.
tu te limitabas a sonreír y asentir hasta que te percataste que el azabache extendía su mano ante ti dándote una bienvenida cálida, fue ahí donde aceptaste, una corriente mágica recorría el cuerpo de ambos, lograron sentir como sus almas se encendían, ambos sintieron la misma emoción, una expresión de sorpresa estaba plasmada en ustedes dos, lágrimas cayeron por tu rostro, por la parte de megumi el estaba impactado ya que pasaban pequeños flashbacks en ustedes sobre cosas que quizás habían pasado o estaban por pasar, soltaron en un instante el agarre pensando seriamente que era lo que acaba de suceder.
al verte con las lágrimas decorando tu rostro, se acercó contigo a retirarlas con ambos pulgares susurrando contra tu oído que todo iba a estar bien, trataba de tranquilizarte y después de esa experiencia tan intensa, decidieronhablar de lo sucedido, coincidiendo en lo que habían experimentado, no se dieron cuenta en qué momento estaban abrazándose y el estaba depositando un beso en tu frente, era todo tan loco pero podría ser que eran... ¿almas de una vida pasada destinadas a conocerse nuevamente?
la confianza que estaba produciéndose entre ustedes era simplemente mágica, no era posible explicarcómo de ser desconocidos pasaron a estar abrazados todo un día, nadie más que ustedes lograrían entenderlo.
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quizás mañana edite esta cosa para que quede mejor o si me da flojera no, JDKNSNFNW, los tqm.
