SHIZUNE KATO QUIÉN PENSO QUE SE HABÍA QUEDADO SOLA, EL DESTINO LE DA VARIAS SORPRESAS, LA OPORTUNIDAD DE REENCONTRARSE CON LOS SUYOS, ASÍ COMO FORMAR SU PROPIA FAMILIA.
Era de día y en los alrededores de la oficina del hokage temblaba como si de un jutsu de tierra se tratará, pero solo era la fuerza descomunal con la que Tsunade golpeaba las cosas estaba hecha una furia esa mañana.
Shizune ¿Puedes decirme por qué tardaste tanto? –
Ha, ha, ha, verá Lady Tsunade – ella daba una risa nerviosa no sabía que excusa dar a su maestra.
No, quiero excusas ¿Qué estuviste haciendo Shizune? – la hokage le seguía gritando a su alumna, y está solo cerraba los ojos ante el enfado de su maestra, afortunadamente la suerte estaba de su lado y llegaron a interrumpir el regaño.
Lady Tsunade los concejeros esperan para la reunión – comento Aoba que acababa de aparecer
La hokage lo vio con furia – Bien ya voy – camino a la salida de la oficina no sin antes dar una advertencia – y tu prepárate, no te dejare ir tan fácil.
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Shizune chillo, la vio con terror y cara de susto sabía lo que le esperaba, aunque fueran maestra y alumna, compañeras y amigas, ella le guardaba respeto a la reina de las babosas, por el simple hecho de estar a su lado todos estos años desde que se quedó sola cuando apenas era una niña, aun así le daba pena y vergüenza haber desobedecido una orden por muy tonta que está fuera, salió de la oficina para dirigirse a algún lugar y almorzar quería estar consigo misma y tomar valor antes de enfrentarse a la Sanin. . .
En un establecimiento de Konoha había una pequeña barra a la vista de cualquiera que pasara por el lugar donde la pelinegra estaba sentada degustando de su desayuno y por qué no, un poco de alcohol. . .
Bebiendo sake tan temprano, acaso ¿no está en horario de trabajo? –
Ella volteo a verlo y solo suspiro retirándose el cabello del rostro para recargarse en la barra poniendo su mano en su mejilla volviendo a la posición en la que estaba.
Se encuentra usted bien Shizune –
Estaba bien hasta hace un momento –
Creo que alguien está de mal humor –
No tiene ninguna misión a donde ir –
Como la asistente del Hokage no ha estado laborando, no, no tengo nada que hacer –
Que le parece si se trepa en un árbol a leer su libro pervertido ¿Es lo que acostumbra hacer no? Cuando está libre –
Me ha estado observando Shizune – él menciono las palabras en un tono coqueto bromista mirándola de reojo.
No se crea tan importante Kakashi, siempre lo encuentro allí cuando me envían a buscarlo – le contesto muy a la defensiva
Tiene razón, no hay mejor lugar para relajarse, debería intentarlo alguna vez –
