𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟗: El cumpleaños de Hyunjin

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–¡Cachorro tonto!

–¡Alfa estúpido!

Jeongin y Hyunjin dieron varias vueltas por la alfombra haciendo que sus aspectos se vean más desalineados luego de muchos manotazos y pequeños golpes entre risas. Jeongin considera injusto que Hyunjin sea más fuerte, pero de cualquier modo están a mano puesto que el último está débil debido a los cambios en su cuerpo

Se separan de su guerra entre risas con Jeongin rindiéndose y Hyunjin con una gran sonrisa debido a su lobo competitivo feliz de ganar cualquier actividad.

Nadie esperaba que Hyunjin fuera un Alfa, ni siquiera él mismo. Todos creían que sería un Beta. El momento de presentación fue una gran noticia en toda la familia. Para Hyunjin sólo fue una pésima semana llena de dolores, sensibilidad y soportar sentimientos impropios, pues le pertenecen a su recién despierto lobo.

Los golpes en la puerta los hacen salir de su burbuja y por ella se asoma una cabellera azabache que al ver a ambos amigos tan juntos entrecierra sus ojos, más no dice nada y se acerca su chico, tomándolo de la mano.

–Hyung's, mamá dice que es hora de cantar cumpleaños –explica y luego le hace ojitos al castaño–. Te guardé un lugar a mi lado.

Hyunjin rueda los ojos ante la escena de su hermanito con una pequeña sonrisa burlesca. Mas sus sentimientos con los de su lobo se mezclan y no sabe muy bien como reaccionar. A este no le agrada lo cercanos que son su hermano con su amigo, al ser un Alfa primerizo es muy posesivo, sobre todo con su familia. A Hyunjin no le gusta eso, es insoportable. Casi tanto como los dolores musculares y los aromas sofocantes.

Van a la sala donde sus padres lo regañan un poco por encerrarse en su habitación en lugar de convivir con todos, pero bueno, no es como si jugar con su mejor amigo sea mejor que convivir con personas de cuarenta años, claro que no.

Las luces se apagan y los cantos comienzan felicitando al pequeño Hyunjin por cumplir trece años siendo un lindo Alfa.

–Pide un deseo.

–¡Desea algo para tu hermano menor!

Todos ríen y el cumpleañero sopla la vela. Aplausos, felicitaciones y peticiones de que meta su bello rostro en el pastel de cumpleaños, a lo que se niega rotundamente, retrocediendo avergonzado de tanta atención.

–¡Hyunjinnie! –exclama Jeongin a su lado y cuando le mira, este le ha embarrado un cupcake azul en todo el rostro causando en todos los presentes risas.

–Ah, por eso me gusta tanto –añade Christopher.

Jeongin trata de contenerse, pero las pestañas de Hyunjin repletas de crema son demasiado para él. Hyunjin entre quejas toma un cupcake rojo y también se lo embarra.

–¡Hey!

–Vayan a lavarse el rostro –pide Jihyo antes de que se les ocurra meter el pastel costoso que compró en todo esto–. Y Chris, baja ese cuchillo de plástico, que tu hermano solo ensució a Jeongin nada más.

–¡Es una declaración de guerra!

Jeongin se sienta en la taza del retrete mientras Hyunjin refriega su rostro frente al lavamanos

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Jeongin se sienta en la taza del retrete mientras Hyunjin refriega su rostro frente al lavamanos.

–¿Qué deseaste?

–No haberme presentado –responde al su olfato estar sensible por el intenso aroma que siente debido a la crema en su rostro. No quiere volver a saber sobre dulces en su vida.

Jeongin asiente comprensivo. Él no se ha presentado, más los diagnósticos que le han dado sus compañeros sí, apuntan a que no es bonito. El primer celo no es para nada placentero, los cambios en tu cuerpo no son cómodos y tener a tu lobo despierto no es tan cool. Independiente de si te presentas como Alfa u Omega. Aún así no puede evitar sentir curiosidad.

–¿Cómo te sientes?

–Como si quisiera echarme en el suelo a descansar. No lo sé, es raro.

–¿Deseas un hueso? –bromea Jeongin acercándose a su mejor amigo, provocándole una sonrisa y que su lobo esté alerta–. ¿Qué te dice tu lobo?

–Está al pendiente de ti. Creo que piensa que me atacarás o…

–¿O…?

–Que me besarás –responde con el ceño fruncido haciendo que Jeongin parta en risas–. ¡Ya! ¡Tú preguntaste!

Las mejillas de Jeongin se ponen rojas a pesar de estar riendo y hasta sosteniendo su estómago por sobre su suéter rosado. Hyunjin se siente avergonzado y su lobo baja la cola. Ahora desea golpearlo, más sabe que su amigo está bromeando.

–Tu lobo Alfa es muy tontito –responde secándose la lágrima que se escapó de sus ojos.

–Mi mejor amigo también.

–¡Oye! Mejor vayamos a abrir tus regalos.

Salen del baño en dirección a la habitación de Hyunjin más en el camino pasan junto a la habitación de los padres de éste alcanzando a escuchar como viejas chismosas que hablan sobre él y su hermano.

–Hyunjin será un buen Alfa, ya se ve buen mozo junto a ese niñito castaño –dice una de las hermanas de Jihyo, es decir, su tía.

Ambos se miran con cara de disgusto. Ew. El lobo de Hyunjin, en cambio, alza ambas orejas.

–No, Nayeon. Al que le gusta Jeongin es Christopher –aclara su madre.

–Pero ese chico se ve a leguas que será un Omega. Y el Alfa de esta familia es Hyunjin, ya sabes lo que dicen…

–Hay casos que no son así. Además, no puedo llegar y decirle a Chris que él no será Alfa, ya que entre hermanos sólo hay uno. Él está muy ilusionado.

Ambos se alejan de la puerta confundidos. Uno más que el otro. A Jeongin esa conversación le deja un mal gusto en la boca. No la entiende del todo y le quedan muchos espacios en blanco. En el caso de Hyunjin, siente tristeza por su hermano, pues ya había escuchado algo parecido más no sabía si era cierto.

–Hyung's, mamá me mandó a que les trajera comida –aperece el menor de nueve años con una bandeja. Al darse cuenta de que estos están junto a la habitación donde sabe está su madre se rectifica–. Digo, papá me envió.

Jeongin ríe olvidándose del tema y desviando toda su atención a su menor. Más en la cabeza de Hyunjin aún ronda una pregunta.

¿Quién le dirá a Christopher que no puede ser Alfa debido a que él ya lo es?

«𝘔𝘺 𝘓𝘪𝘵𝘵𝘭𝘦 𝘈𝘭𝘱𝘩𝘢» | •𝘾𝙝𝙖𝙉𝙞𝙣•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora