☆Irresistible☆ {Gustabobowl AU}

11

Emilio y Horacio continuaron hablando del reto.

Ya que Horacio se había enterado, Emilio pensó que sería conveniente que lo supiese todo.

- ¡¿QUÉ HIZO QUÉ?! - Horacio se encontraba con los puños apretados de la ira, muy enfadado.

- Pero no se preocupe wey, le metí un buen putaso y cuando lo vuelva a ver lo mando con el diablo - Dijo Emilio amenazante.

- Trujillo es hombre muerto. Pobre Gustabo... Y ese día yo no estuve en casa porque tenía miedo a enfrentarme a él, joder, soy imbécil.

- ¿Y dónde estuvo? 

- En casa de Claudio - Emilio le dirigió una mirada interrogante - ¿Qué? Me tenía que desquitar, Gustabo me había rechazado y estaba mal.

Emilio solo suspiró y se levantó para ir a la cocina y servirse un vaso de vodka.

- Emilio, tú no paras, ¿Eh? - Dijo Horacio riendo - ¿No estuviste ayer tomando con Gustabo y Volkov? 

- Si wey, ¿Y qué? Un buen vodka nunca hace mal.

- Anda ven aquí, deja ya de beber y dale un descanso a tu hígado, sígueme contando los demás retos.

Emilio rodó los ojos y dejó el vaso sobre la encimera de la cocina.

- Nada más, Gustabo hizo casi todos los retos.

- ¿Y crees que cumpla su último reto?

- No creo joto, y si lo hace, terminará con un par de porrazos - Dijo Emilio riendo.

- Puede que si o... - Horacio fue interrumpido por el sonido de su móvil.

Llamada de Conway.

Al instante descolgó el teléfono.

"¿Sí?"

"Capullo, llevo medio hora llamando a tu compañero, ¿Dónde coño estáis?"

"¿A Gustabo? N-No está disponible, ¿Por qué? ¿Sucede algo?

"Sí, que quiero vuestros culos ahora mismo en comisaría"

"¿Ahora? Emm... No podemos, estamos lejos, si, si, muy lejos"

"He dicho que os quiero en mi puta comisaría YA"

Horacio suspiró.

"Gustabo está de resaca" - Confesó finalmente.

"¿QUÉ? Mira tráelo a rastras si hace falta, pero en menos de 10 minutos os quiero aquí a los dos"

"10-4 Superintendente"

Colgó el teléfono.

Hoy el superintendente, al parecer, no estaba con los cojones católicos.

Horacio volvió a suspirar.

- Voy a despertar a Gustabo, prepárate para soportar su mal humor.

- ¿Para qué carajos lo va a despertar?

- Tenemos que ir a la comisaría ahora mismo, órdenes del súper.

Horacio entró cautelosamente en la habitación de Gustabo quien dormía profundamente abrazado a la almohada.

Y Horacio sonrió al ver tan tierna escena.

Se aproximó a la cama y agitó suavemente el brazo de Gustabo.

- Venga, despierta dormilón - Dijo con voz suave.

- 5 minutos más...mmm - Murmuró adormilado Gustabo.