— ¿Y dónde está amarillo? —preguntó Lisa, una vez salió del hospital con unas gafas para proteger sus ojos del polvo no dejaba de preguntar—
— amarillo está en el hotel —respondió Jennie con una risita, Lisa iba prendida a su brazo preguntando por todo—
— ¿Por qué eres tan bonita? —preguntó Lisa inocentemente tanteando la cara de Jennie— te reconocía por tu voz y por medio de mis manos, pero eres totalmente distinta a como alguna vez trate de imaginar —
— ¿Crees que soy bonita? —preguntó Jennie alzando la ceja, la mirada de Lisa seguía el movimiento— ¿que vez? —
— Esa cosa que dijiste son cejas se mueven —dijo con sorpresa— son peluditas, nunca pensé como se verían las cejas, creo que no siquiera repare en su forma o existencia —
— ¿Y qué es lo mas te sorprende entonces? —dijo riendo ligeramente cuando Lisa observo la pantalla gigante en el edificio, veía con asombro las imágenes ahí—
— Mis ojos me sorprendieron —dijo mirando a Jennie— son verdes, es un color muy bonito —
— Si, tienes ojos muy bonitos —asintió Jennie— muy coloridos —
— Es diferente ser ciego que cerrar los ojos —dijo Lisa cerrando los ojos momentáneamente para luego abrirlos— también tengo que parpadear, antes solo permanecía con los ojos cerrados sin ver nada —
— Lo que vez es oscuridad, se podría decir que es el negro —respondió Jennie— pero no es un color —
— Me da miedo perderme cosas a mi alrededor —dijo Lisa mirando en todas direcciones— la luz todavía pasa por mis párpados cuando cierro los ojos, pero sigo viendo oscuridad, de verdad es muy diferente todo —Murmuró analizando a Jennie con la mirada, Jennie se sentía nerviosa, ahora tenía que ver a esas dos esmeraldas sin ponerse nerviosa— ya quiero ver a amarillo —
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
