4. Azul🌸

1.8K 348 25
                                    

Jugar con el perrito le había sentado bien. En realidad se la pasaba aburrida y ya que el perro era más bien demasiado profesional no actuaba tanto como un perro, era demasiado tranquilo.

Ese día Jennie tenía que hacer un trabajo con alguien fuera y no podría ir a verla. Su mamá le dijo que quizá se podía sentir celosa pero que a final de cuentas debería estar agradecida.

Supuso que tenia razón, nadie quería ser amigo de un ciego, menos en una sociedad donde vivía.

Ella ni siquiera sabía si era bonita y esa clase de cosas comenzaban a agobiarla. Ya estaba creciendo pero no sabía nada de su alrededor.

Tenía memorizado cada rincón de la casa y se movía en ella como si de verdad pudiera ver, o eso decía su mamá.

Escucho como su mamá se acercó y dejó un plato a su lado en la mesa de mármol, el sonido siendo algo fuerte.

- Son moras y son azules -dijo posiblemente después de observar como iba a preguntar-

Se callo tanteando el plato para echarse una a la boca, la primera el dulce, embriagante, así que tomó otra pensando que sabría igual.

Pará su sorpresa la siguiente era amarga, tan amarga que casi quiso escupirla. El sonido de la puerta abrirse llamó su atención y los pasos apresurados que tanto conocía llegaron a sus oídos, entonces le dio una Mora a Amarillo, su perro.

Ciertamente Lisa prefería permanecer con los ojos cerrados ya que aunque los abriera no podía ver nada.

- Pensé que tardaría pero llegué puntual -dijo la conocida voz de Jennie en tanto ella comía otra Mora y sentía el cuerpo de Amarillo emocionarse ante la voz de Jennie-

Su monotonía era agobiante.

Su monotonía era agobiante

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Flavors (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora