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Días después , volvió a comprar la revista de CatCo, a ver que había escrito Kara de ella.
Una vez en su oficina se sentó en su sofá y comenzó a leer.
Dos golpes en la puerta la distraen de su lectura.
-Adelante - Lena dijo sin apartar la vista del artículo, seguramente sería su secretaria que entraba como cada mañana a dejarle algún paquete o documentación. Continuo leyendo.
-Ejem - Alguien se aclaró la garganta, Lena miró hacia la puerta, Kara estaba allí parada en el umbral de la puerta - Tu secretaria no estaba, y probé a ver si estabas, ¿Puedo? - Se excusó ante la mirada inquisitoria de Lena.
Lena dejó la revista en la mesa y le indicaba a Kara que se sentase con ella.
Kara se sentó a su lado mirando la revista y arreglándose las gafas.
-Definitivamente tienes un don con las palabras.- Kara se rió nerviosamente, Lena jugueteaba con sus propias manos, estaba nerviosa, no sabía porque pero la joven le transmitía tanta paz que se permitió abrirse a ella - Creí que ibas a hacer una crítica negativa de mi.
-Sinceramente. Lo intente - Kara confiesa metiendo las manos en su bolsillo, levantando los hombros y Lena levantó una ceja de sorpresa, obvio que la rubia no iba a confiar en ella, Lena trató de contener su tristeza- escribí un artículo criticando el artefacto. Mi jefe lo desecho y me toco reescribirlo - La franqueza de Kara era un soplo aire fresco, y su sinceridad provocó que Lena entristeciera, "eso lo explicaba todo" se dijo, realmente no confiaba en ella ¿Porque le importaba tanto? - Pero... me alegro que lo hiciese - Lena levantó la cabeza tan rapido que podria jurar que casi se desnuca ella sola - Pasó algo... y reanalizé mi posición.
-¿Enserio?, - Lena, jugueteo con su propio pelo y Kara se rió, evitando la mirada de Lena, sonrojada. parecía que a Lena le gustaba hacer sonrojar a Kara.
Se formó un silencio cómodo entre ambas. Lena estaba apoyada con el codo en el respaldo del sofá y su mano en su cabeza apoyándose, Kara sonreía sonrojada y se llevaba las manos a las gafas.
-Aún creo que la ley de amnistía es algo grandioso pero ... existen malos alienígenas como malos humanos - La inocencia de Kara hacia sonreir a Lena que seguía apoyada en el sofá jugando con su pelo.
Lena sonrió ampliamente al verla sonrojada.
-Me alegra que vieses mi punto de vista - Lena sintió que podía confiar en Kara y se permitió que la conociese - Cuando fui adoptada por los Luthor adoraba a Lex, cuando mostró quien era me destrozó -suspira - intenté todo para cambiarlo y convencerlo de hacer lo correcto - negando tristemente recordando todo, lo que eliminó la sonrisa de Kara - Fue inutil, lo perdí - Kara la miraba prestandole toda la atención del mundo - al final acepte que algunas personas son malas y nada que hagas lo cambiara - suspiro Kara la miraba con una mezcla de adoración e intriga - solo nos queda protegernos- Kara sonrió genuinamente a lo que Lena solo pudo sonreír.
-Si - afirmó Kara se sonrieron la una a la otra, Lena cayó en la cuenta de lo a gusto, tranquila y bien que se sentía junto a Kara.

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