—De casualidad... ¿No subiste de peso durante estos últimos meses? —Dijo tratando de mantener el equilibrio, mientras tenía a Reborn cargando de su espalda.
—Te dije que podía caminar solo... —Contestó fastidiado.
—Ajá, igual que las otras catorce que te estampaste contra el suelo.
—Vale, entonces no te quejes.
—No lo hacía. Tan solo estaba expresando mis sentimientos de preocupación hacia ti, con unos cuantos comentarios humorísticos.
—Ya te he dicho que estoy bien, ¡Coño!
—Te creería si no fuera porque estás ardiendo en fiebre. —Mara paró de caminar y se apoyó en una roca lo suficiente grande como para poder dejar a Reborn en ella. —¿Seguro que no estás en celo?
—No, Mara. Por vigésima cuarta vez , ¡No estoy en celo! —Con sus manos despegó su ropa lo más que pudo para dejar pasar la mayor cantidad de aire posible. —Solo tengo un calor que flipas, una ansiedad de la hostia, y tengo la profunda necesidad de tener a mi Omega entre mi-
—Vale, ya entendí. No necesito más información. —Se dejó caer en el suelo. —En verdad... ¿Su lazo es así de fuerte?
—Con el simple hecho de que no hubo necesidad de conocernos para que todo esto pasase... Creo ya se entiende.
—Cierto, ¿Por qué no regresaste a la ciudad en vez de quedarte ahí dentro?
—Bueno... Quizá porque la mayoría de la gente que en verdad me importaba, estaba conmigo. Aunque nunca me olvidé de vosotros.
—Sí... Sobre eso, creo que ahora soy solo yo. —Rió con nerviosismo.
—¿Por qué dices eso? —Giró en su lugar, y se apoyó en su costado, mirando a Mara. —¿Ha pasado algo en estos últimos meses?
—No... O quizás sí. —Volteó la mirada hacia otro lugar. —Solo que todos los demás saben qué hacer con su vida, y yo sigo varada en el mismo lugar...
—Y te preocupa no hacer nada con tu vida, ¿No es así? —. Mara se quedó callada. —Te preocupa no poder salir del lugar donde naciste, desperdiciar tu vida.
—Tal vez, no lo sé...
—Sea lo que sea, tiene bastante lógica. —Volvió a recostarse en la piedra, mirando el cielo rojizo que tenía delante. —Siempre fuiste alguien a quien no le gustaba la idea de "No hacer nada".
—Para tí es fácil decirlo, siempre encuentras un motivo por el cual vivir. Por el cual salir adelante, o asegurar un futuro.
—Así que era eso... —Murmuró. —Sabes, no todo lo que las personas ven de mí es cierto. El único motivo por el cual siempre termino encontrando algo por lo que vivir, es porque me aterra volver a estar solo.
—¿"Volver a"?
—Bueno, la soledad era mi mejor amiga. Por lo menos hasta que llegasteis a mi vida.
—No me lo creo, ¡¿El viejo se ha puesto sentimental?!
—¡Que no, coño! Solo estoy siendo sincero. —Volvió a mirar a Mara. —¿Sabes qué? Andando, que el tiempo se nos está acabando y necesito terminar esto de una vez por todas.
—¿No dijiste lo mismo cuando regresaste a la ciudad? —Se levantó de donde estaba.
—No... Bueno, quizás sí que lo haya dicho. Solo que esta vez será definitivo.
ESTÁS LEYENDO
Both Sides | RebornPlay [Omegaverse] (En Edición)
FanfictionEn un mundo donde los Alfas, Betas y Omegas son excluidos por una sociedad que se hace llamar la más "Perfecta" (Siendo esta una variación de los Betas ); Auron, uno de los Omegas más puros, y, a la vez residente, de "Karmaland": uno de los pueblos...