𝚆𝚑𝚘? × 𝑚𝑖𝑛𝑠𝑢𝑛𝑔

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Jisung seguía jugando con su comida en el almuerzo, hace días que su apetito era casi nulo, incluso cuando festejaron el chicken fest no fue capaz de comerse más de dos alitas fritas de pollo, y Eunwoo no pudo negar ponerse contento al recibir cuatro alitas extras en su cajita de pollo frito.

Changbin lo observó en silencio, estaba de pie frente a la esfera, viendo la situación del rubio al que ya se le notaban dos centímetros de su cabello oscuro natural. Sus ojos heterocromaticos se cerraron un momento, Changbin había escrito dos cartas, una para Jisung y la otra para  Felix, lo hizo así porque sabía que ambos no querían hablar con él y sentía que una carta era un gran paso para sus chicos notaran lo arrepentido que estaba, pero con Minho la cosa era distinta.

Sabía que para decirle la verdad a Minho tenía que hablarle sobre el sistema dragón, y aunque tenía claro que el chico estudiaba medicina y podría estar de alguna manera relacionado con los trastornos mentales, existían muchas posibilidades de que no creyera en él, pero al contrario de Jisung no se iba a dar por vencido, así que lo pensó por mucho tiempo, necesitaba ir con Minho y contarle todo.

Lo que se resumiría en dos caminos, el primero y más lamentable sería que Minho se alejara aún más creyendo como todos que el TID era un trastorno que tenían los psicópatas y que por ende era una persona peligrosa, y el segundo más ambicioso era, que Minho le creyera y que de alguna manera pudiera perdonarlo, pero aun así Changbin pensó que el chico se alejaría de todos modos, pero sabiendo la verdad y Jisung quedaría con su honor intacto.

Changbin se vio en primera persona, después de cuatro semanas, tomó un poco de la limonada con jengibre de Jisung y se levantó del asiento con su bandeja, la cual dejó en un mueble de metal en donde todos dejaban las suyas y se dirigió a la mesa de Minho.

Caminó a paso seguro hasta el grupo de chicos, y al llegar se aclaró la voz llamando la atención de todos especialmente la de Minho.

- Hola... - Saludó Changbin con la voz de Jisung sonando más ronca de lo normal.

Jeongin se le quedó viendo y sus orejas se pusieron rojas. Ambos habían hablado hace dos semanas, y Jisung le había dicho al chico que no se preocupara ni que lo sintiera porque era todo su responsabilidad, y a pesar de que Jeongin había discrepado ante eso porque un beso no se daba de uno, ambos habían quedado de acuerdo en no hablar de ello.

- ¿Qué necesitas? - Preguntó Hyunjin, Minho desvió su mirada hacia otro lado.

- Minho, quiero hablar contigo - Dijo Changbin pasando por alto la mirada acusadora que le estaba enviando Seungmin, y la de Hyunjin que tampoco era muy buena.

- Tengo cosas que hacer - Dijo Minho levantándose, poniendo su mochila en un hombro y llevando su bandeja.

Changbin lo siguió a pesar del llamado amenazador de Seungmin. Minho dejó su bandeja y caminó más rápido para llegar al pasillo pero antes de hacerlo Changbin ya lo estaba sosteniendo del brazo con firmeza.

- Suéltame - Pidió Minho evitando el contacto visual, con el rostro malhumorado sin intentar soltarse.

- Tengo que contarte algo - Murmuró Changbin aflojando el agarre.

- ¿Ahora? Te di una oportunidad para que me dijeras todo hace casi un mes, y te quedaste callado - Habló Minho viendo por primera vez los ojos de Changbin.

- Eso se lo dijiste a Jisung.

- ¿Por qué hablas en tercera persona? Tú eres Jisung, tu besaste a Jeongin y te burlaste de mi.

- Jisung no besó a Jeongin, Jisung jamás se burlaría de ti, Jisung te ama de la forma más desinteresada del mundo, ¿sabes cuantos retratos tiene de ti? ¿sabes cuán atractivos le resultan tus lunares? ¿o como le gusta tocar tu cabello y el aroma de el? - El rostro de Minho se relajó y sus ojos comenzaron a cristalizarse.