Princesas Encantadoras

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Autora:M-neko-chan [E.N].

Los personajes de Princesa Encantadora no me pertenecen, pero la historia es completamente mía y 100% original.

Todos los derechos están reservados a su autor, quién no permite que su obra sea utilizado o adaptada, sin su consentimiento.

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[El mundo sigue su curso]
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Una escena que se repetía una y otra, y otra, y otra ves en su cabeza.

No importa cuántas veces lo intentó en esos 5 largos años, el rostro de Athanasia no desaparecía de su mente.

Su cuerpo empapado por la lluvia, su rostro bañado en lágrimas, y sus lastimeras súplicas.

[-¡Por favor! ¡Escúchame!.]

[-¿Escucharte dices?.]

¿Qué demonios quería que escuchara?.

Se hubiera reído a carcajadas de no haber sentido por que el malestar en su pecho se lo impidió.

¿Él lo había visto todo, y aún así quería que la escuchara?.

[-Escucha bien Athanasia.]

Lucas decidió entonces que iba a ser el malo, el villano.

Aún si prometió nunca lastimarla, quería hacerlo ¡Debía hacerlo!. Nadie se burlaría de él nuevamente.

[-Te odio.]

Recordó que Athanasia se había detenido antes de que pudiera tocar su espalda. .

[-Te odio princesita abandonada.]

Y el show dio comienzo. Una sonrisa vil apareció en sus labios de granada.

[-Yo mismo pienso que soy un estúpido al permitirme que entraras a mi vida de todas las maneras posibles, maldita bastarda.]

Athanasia había seguído retrocediendo hasta tropezar con sus pies y caer al suelo sentada.

[-Fue una equivocación sentir lastima por ti, y estar a tú lado ¡Jeh!. No volverá a suceder.]

[-Por favor Lucas.]

La quebradiza voz apenas era audible para sus oído, y el que le suplicara le dolió más.

[-Eres todo lo que me queda. No me dejes por favor, eres mi única familia además de Jannette.]

Por un momento quería retractarse de lo que decía. Sus palabras le llegaron al corazón, pero, tristemente su dolor podía mas.

[-Estúpida, yo nunca te consideré siquiera eso. La verdad siento tanta lastima por ti, vamos, ni siquiera te considero una persona].

[-¡Te amo Lucas!.]

Esas fueron las palabras que para él tuvieron tanto significado. Pero se dijo a sí mismo que debía verla llorar lágrimas de sangre, por que ahora era el villano.

[-Me sorprende que un pedazo de muñeca rota como tú pueda sentir.]

Y en un chasquido de sus dedos él ya no estuvo más ahí. Su destino fue su oficina en la torre mágica.

Arrojó todo lo que se cruzó a su paso, volteó los muebles y quebró el espejo que estaba colgado en la pared.

Quemó todas las carta y regalos que la chica le había dado en sus cumpleaños y días importantes con su magia. Uno de ellos era el festejo de su amistad y cosas particulares.