Amortentia [Yoonmin]

✨04✨

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"No había estado tan feliz, desde que Papa me llevo a ese partido de quidditch, para enmendar el haber olvidado mi cumpleaños"

Jimin puso sus ojos en blanco, no es que no se alegrara por el buen estado de animo de su amigo Taehyung, pero si su alegría le costaría una vergüenza tremenda a el, era obvio que no podía celebrar su felicidad.

"Ya has repetido lo feliz que estas como unas trescientas veces Tae, ¿Podríamos cambiar el tema, por favor?" iban de camino a su sala común, después del partido, tenían la tarde del sábado libre, y después de comer un semejante banquete en el comedor, decidieron ir a sus habitaciones a descansar y a no hacer absolutamente nada.

"Si, si, lo siento, debo sonar tan molesto ahora mismo" reconoció el castaño "Es que simplemente no me lo puedo creer Jimin" revolvía su propio cabello hasta dejarlo todo despeinado, a causa de los nervios.

Porque, para desgracia de Jimin, Min Jungkook había aceptado salir con Taehyung en su próxima visita a Hogsmeade, y eso solo significaba una cosa.

"Tu también deberías estar ansioso Jimin, digo...estas por pedirle una cita a alguien. Eso debe ser motivo suficiente parar ir al baño cada dos segundos" se burlo, Taehyung no olvidaria la apuesta por nada del mundo.

"¿Crees que eso me afecta?" argumento el rubio "Sabes que no le temo a esas cosas, soy muy sociable" se encogio de hombros restandole importancia "Esta en mi naturaleza" trataba de fingir seguridad, mas que para su amigo, para el mismo. Ya había entrado en pánico en pleno comedor cuando Taehyung le confeso lo que el pelinegro cazador le había dicho en las carpas del campo de quidditch. Ya se había lamentado y gritado idiota mentalmente muchas veces, ahora pensaba en que no era para tanto, solo le preguntaría a Min rápidamente, este no aceptaría y listo, se acabaría su martirio.

Porque no había manera en que aquel joven de uniforme esmeralda, aceptara salir con el. Jimin sabia que contaba con encanto natural para agradarle a los demás, y aunque nunca había salido con nadie, le era muy fácil coquetear con sus compañeros y compañeras. Recuerda que cuando estaba en cuarto año, una de las niñas de su casa, le robo un beso, apenas un pico en los labios, mientras cenaban buñuelos con azúcar.

Desde ese día, había descubierto que su boca tenia un uso en especifico que le agradaba mucho.

"Admiro tu valentía, ojala yo tuviera la seguridad que tienes para los temas románticos"

"Y ojala yo pudiera lanzarles un hechizo para lavarles el cerebro hormonal que tienen ustedes dos" El prefecto los empujaba para que caminaran mas rápido. "¿Necesito recordarles que están ya en sexto año? el que hayan obtenido buenas notas en sus TIMOS no quiere decir que puedan relajarse ahora"

"Uff, eres muy pesado Seokjin" se quejo Jimin "Ya colapse de los nervios el curso pasado, danos un respiro amigo" Y aunque sus resultados no fueron del todo desfavorables en su TIMOS, el sexto año en Hogwarts no era para nada un tiempo de descanso, por lo contrario, ahora sus clases eras mas serias, nivel EXTASIS y tenían que esforzarse en demacia si querían concluir con sus estudios satisfactoriamente en el curso siguiente.