Lo que se esconde entre nosotros (Among us)

Victoria Tripulantes

Vic seguía su camino a través de los pasillos. Recién había terminado con la vida de Rebekah, la tripulante de traje color café y tan solo le faltaban dos víctimas, las había reservado para el final pues sabía que tanto Flowers como Kenneth eran los tripulantes más débiles y por tanto los más sencillos de asesinar, y para su fortuna ahora ya se habían separado.

Las luces de emergencia seguían activas por lo que eso le confirmaba que aún no había reparado las principales, aunque claro, el principal objetivo para los dos sobrevivientes restantes era reparar el oxigeno y fuere como fuere para eso tendrían que ir a Electricidad.

Aquella área que justo sería la más peligrosa. Aquella en la que él mismo se encargó de Keith mientras Mohn, la otra impostora se encargaba de encubrir sus movimientos y a su vez hiciera que todos inculparan a AZ por mera diversión.

El oxigeno ya se había terminado y a ambos tripulantes no les debería de quedar más de 30 minutos antes de que sus reservaras se agotaran. Él al ser un Parásito cambiador de forma alienígena podía resistir el tiempo suficiente para terminar con la vida de sus víctimas y poder reparar el mismo el suministro de oxigeno luego de eso. Tendría después bastantes horas para poder degustar de la carne de los 5 cadáveres que entonces habría.

—¿O serán 6? —se preguntó para sí mismo—. El cuerpo de Doc ya debe estar bastante putrefacto para ahora. Da igual, le echaré un vistazo cuando termine con todo.

Siguiendo su recorrido por fin llegó a electricidad, la puerta ya estaba abierta pues sabía que Kenneth, quien momentos antes había tratado de ayudar a Rebekah, había decidido abandonarla a su suerte y posiblemente salvarse él solo.

Entró y vio al chico de traje blanco agazapado, reparando los cables necesarios para poder desviar energía a la Sala de Oxigeno y así hacer que Flowers terminase el trabajo. Sin embargo eso no sucedería.

Cambio a su forma natural, aquel monstruo negro con colmillos afilados y llenos de baba y caminó a paso lento hasta posicionarse detrás de Kenneth.

—¿No te das cuenta que es inútil? —preguntó Vic—. Perdiste, todos perdieron y morirás junto con ellos.

Sus tentáculos se acercaron a Kenneth.

El blanco seguía ignorándolo, pero podía escuchar los llantos de lamento del chico mientras trabajaba más rápido para lograr su cometido.

—¡Me molesta que me ignores! —gritó Vic.

Sus tentáculos estuvieron a punto de rodear a Kenneth, sin embargo el chico había sido más listo. Los dos cables que tenía en las manos los dirigió hacia los tentáculos de Vic. Ocasionándole una potente descarga eléctrica.

—¡Esto es por El Capitán!

—¡Maldito Bastardo! —gritó Vic.

La descarga le había quemado una de sus extremidades, el humo y el desagradable olor de la carne quemada inundaban el ambiente.

—¡Te lo mereces! —dijo Kenneth—. Esto es por Keith.

Kenneth dio una segunda descarga eléctrica y Vic se retorció de dolor.

—¡N-no creas que la tienes tan fácil!

El impostor estaba más enojado ahora y usaría todas sus fuerzas para asesinar a Kenneth, aquel a quien consideraba debilucho y patético era quien más le había dañado. Corrió hacia él pero se detuvo cuando por detrás sintió un dolor punzante.

Flowers, la otra sobreviviente con una mezcla de emociones: miedo, rabia, inseguridad, estaba ahí, sin que Vic lo hubiese previsto. Movió uno de sus tentáculos hacia la zona en la cual había sido lastimado tan solo para desenterrar un cuchillo.