La historia trate de como seria si yo llegara al mundo de Boku No Hero luego de morir. Cuando despierto me encuentro con una especie de Dios que me otorga la oportunidad de ir a un mundo con deseos y así es como comienza mi historia.
Los personajes...
Killu-chan el desayuno esta listo - pude escuchar la voz de mi auto proclamada hermana mayor del otro lado de la puerta - Ademas tienes que darte prisa, no queras llegar tarde el primer día en Yūei verdad? - pude escuchar decir a Akane, mientras me terminaba de poner el uniforme de la academia.
Si, Si ya se, bajo en unos segundos - dije mientras me miraba en el espejo y escuche un Ok de Akane - Tch, Esto es molesto - dije mientras me intentaba poner bien la corbata - Odio usar uniforme en una academia, porque tenemos que usar esto -volví a quejarme porque llevaba unos minutos tratando de poner bien la corbata - Ahhh que no jodan - dije para dejar de intentar poner bien esa mi*rda.
Después de es momento un tanto peculiar, desayune y estaba en la salida de mi casa con una Akane que quería desearme suerte y despedirse, ella quería irme a dejar a la puerta de mi aula, pero después de una rato de discusión, pude convencerla de que no necesitaba que me fuera a dejar.
Killua-chan tienes todas tus cosas verdad? - me pregunto ya en la puerta de salida de mi casa, a lo que yo solo asentí con una sonrisa - Y enserio no quieres que te lleve en el auto? - volvió a preguntar ella con un tono de esperanza, a lo que yo negué con la cabeza y ella hizo un puchero y solo pude pensar *Kawaii* y poner mi mano en su cabeza y acariciarla un poco y como ella era mas baja que yo no tanto pero lo justo para regresar le todas las bromas que me hizo de que me iba a quedar como Shota toda mi vida xd.
No, estoy seguro que puedo llegar sin ningún inconveniente - respondí a su pregunta y quitaba mi mano por lo que ella hizo un puchero para luego darme una sonrisa alegre, estaba por despedirme pero ella me jalo del cuello de mi uniforme y me miro severamente.
Killu-chan, porque no me pediste ayuda mira como dejaste tu corbata - dijo ella con una voz reprochadora, por lo que yo solo rasque tímidamente mi mejía derecha y reía nervioso, por lo que ella me arreglo la corbata de los mil demonios haciendo parecer fácil de hacer.
Listo, ahora te ves mejor - dijo ella con una sonrisa, por lo que le agradecí y estaba a punto de irme pero decidí molestarla o tal vez lo tomaba como un premio quien sabe.
Rápidamente la bese en la frente y dije con una sonrisa - !!Adiós Onee-chan!! - dije y antes de que ella pudiera reaccionar por el acto tan repentino me había ido en un *Shunshin no Jutsu* y a lo lejos pude escuchar un KYA! de una chica por lo que solo pude soltar una pequeña risa.
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-Ubicación: Yūei-
Actualmente me encontraba por los pasillos de la Academia de héroes, buscando mi respectiva aula, estaba escuchando música porque me estaba aburriendo asta que encontré la puerta del aula 1A.
"MMm whoaa esta puerta es enorme, no bromeaban de que esta puerta era así en el anime" pensé viendo la enorme puerta, para después encogerme de hombros ya que me valió v*rga xd.
