- Si... Si quiero... -
El bicolor abrió la caja y vió un dildo de silicona.
- Morado? - preguntó con una sonrisa burlona.
- Que importa el color? - desvío la mirada, avergonzado.
- Piensas en Mineta mientras te masturbas? -
- Que mierda? Claro que no! Que tiene que ver el color? -
- Podría haber sido rojo, o blanco, o azul, quieres que me sienta celoso? -
- Acaso puedes sentir eso? -
- Lo hago, siempre estoy celoso, cuando cualquier persona te habla me da celos, pero es un sentimiento tóxico, e incluso antes de leer los consejos sabía que no tenía que exteriorizarlos, ya que confío en ti, pero es inevitable no sentirlos -
- Los consejos? -
- Olvídalo, nos estamos desviando del tema principal -
- Cierto, bueno... -
- Bien... Vas a desnudarte o también tengo que ayudarte con eso? -
- Shouto! -
- Que? -
- No digas cosas tan desvergonzadas -
- No te gustan? Porque esa erección dice otra cosa - se burló, viendo cómo el menor cubría su hombría.
- Yo... -
- Bien, si prefieres que yo te desnude... -
- No! Yo lo hago, está bien... - lo detuvo, comenzando a quitarse la camisa, dejándole una maravillosa vista al heterocromático de unos abdominales perfectamente marcados y unos "pectorales" enormes, con unos rosados e hinchados pezones, debido a que hacía un rato los estuvo chupando con total gusto.
Desabrochó su pantalón y se lo quitó, al igual que las medias, quedando solo con un pequeño y apretado boxer, que marcaba muy bien su abultado miembro.
- Creo que te faltó algo - dijo el bicolor, viendolo desde la cama.
- Tú no vas a quitarte nada? -
- No -
- Pero... Es injusto... -
- Te da vergüenza que te vea el pene? Te lo ví hace un rato, y te lo chupé Katsuki, en ese momento no tenías vergüenza, no? - preguntó, haciendo que toda la sangre del rubio se vaya a su rostro.
- Yo... Es que hace rato estaba muy caliente y no pensaba bien lo que -
- Quieres que vuelva a calentarte? -
- No... Me lo quitaré... - Susurró, bajando lentamente la única prenda que tenía, hasta quedar totalmente desnudo.
- Dios... No te imaginas cuántas veces te imaginé así... Ven aquí - ordenó, viendo cómo el menor caminaba hacia él, jugando con sus dedos - Vamos, siéntate aquí - le dijo una vez estuvo frente a él, haciendo que el ojicarmín se montará en su regazo - Puedo? - preguntó acercando sus manos a las piernas del más bajo, viendo cómo asentía, y por fin lo tocó, con sus grandes y ásperas manos, subiendo a sus caderas, bajando nuevamente, pero para apretar con fuerza su trasero.
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Malditamente cursi - TodoBaku. [En Proceso]
RomansaPor razones obvias, Katsuki y Shouto eran "novios", el problema era que el bicolor no demostraba en lo más mínimo ni la más pequeña muestra de afecto, así que el rubio, cansado por no recibir ni un mísero beso de su pareja, le exigió romanticismo, d...