Malditamente cursi - TodoBaku. [En Proceso]

Capítulo V.

- Y qué pasó después? -

- Eso, solo me dijo que tenía que irme a dormir porque era malditamente tarde -

- Dios... Bueno... Supongo que se toma su tiempo, está bien Kats, no quiere ir rápido, tal vez tiene miedo de cagarla, no te preocupes -

- Que no me preocupe dices, me dejó caliente toda la noche y no pude pegar un maldito ojo -

- Entiendo, si Izu me hicieron eso, seguramente lo ataría a la cama y lo haría follarme toda la noche -

- Uhg... No hables así de Deku, que maldito asco -

- Que extraño, Kacchan habla y las palabras que salen de su boca son "Deku" y "asco", me gustaría decir que me sorprende, pero no es así Kacchan - habló el peliverde metiéndose en la conversación.

- Hola - dijo el bicolor, detrás de él, saludando a los dos presentes.

- Hola Todoroki, como has estado? -

- Bien, Bakugo, quieres que hagamos equipo juntos? -

- Si, claro, adiós pelos de mierda -

- Si... Cielo, vayamos por un helado hoy - dijo tomando el brazo del pecoso.

- Está bien mi amor, quieres ir a pasear al centro? -

- Si! Podemos ir juntos a la tienda de cómics que abrieron la semana pasada! -

- Bien, cuáles deberíamos comprar? -

- Nos faltan los últimos dos tomos de la última que comenzamos a leer -

- Cierto, bien, compraremos esas -

El rubio miró a su novio que prestaba atención a lo que el profesor hablaba sobre las técnicas qué podían usar y demás.

- Que sucede? - preguntó si siquiera tener que mirarlo.

- Como puedes saber que algo me pasa si ni siquiera me estás viendo? -

- Yo lo sé todo -

- Uhg... Eso decía mi madre antes de castigarme - confesó haciendo reír al bicolor.

- Presta atención - dijo viendo nuevamente al profesor.

Una vez terminó de dar las indicaciones, el rubio habló.

- Deberíamos comenzar por la derecha -

- Bien... Que te pasaba hace un momento? -

- Nada -

- Seguro? -

- Si... -

- Seguro? -

- Que si, todo está bien -

- Como digas... Bien, vamos a la derecha entonces -

Los días pasaban todos iguales, estaban casi todo el tiempo juntos, ya que estudiaban y entrenaban seguidamente.

Tres golpes sonaron y el bicolor abrió.

- Oh... Hola Bakugo -

- Hola... Feliz primer mes -

- Cuentas eso? -

- Claro, como sabremos cuánto tiempo estamos juntos si no cuento? -

- Si es para siempre que importa cuando empezamos? - preguntó confundido.

- Crees que estaremos juntos para siempre? -

- Bueno, supongo que para eso estamos juntos, no? Para que lo haríamos si sabemos que vamos a terminar? -

- Muy cierto, pero igual es importante contar el tiempo -

- No lo veo necesario, lo importante es que estemos juntos, no hace cuánto -

El menor suspiró, acostumbrado a que su novio cortara todo el romanticismo que tanto le costaba sacar de su interior.

- Pues tal vez tienes razón y no sea importante, pero es una buena excusa, no crees? -

- Excusa? Para que? -

- Pues para divertirnos un poco - susurró sentando al mayor en la cama, subiendo a sus piernas - Quieres divertirte Shouto? -

- Di...vertirme? - su pregunta se respondió con el beso que el rubio la dió, metiendo su lengua en la boca del mayor.

- Si... Quieres divertirte hoy? - preguntó moviendo sus caderas, restregando su entrada contra el miembro del mayor.

Desde aquella vez, no había tenido oportunidad de volver a intimar siquiera un poco con el bicolor, ya que evitaba estar a solas con el rubio a toda costa.

- Deberíamos detenernos -

- Que excusa vas a darme ahora? No quieres seguir? - preguntó sintiendo unas manos invadir su cintura por debajo de la camiseta.

- No... No quiero seguir... -

- Pero si eres tú quien me está manoseando -

- Que? Mierda... Lo siento... -

- No te disculpes, sigue -

- No... Basta, hagamos cualquier otra cosa, por favor -

Debía ponerse límites, sabía que una vez comenzara no iba a poder detenerse, y no quería ese tipo de relación, adoraba estar con el rubio, pero no quería que piense que solo lo buscaba por sexo.

- Pero... -

- Por favor, no quiero seguir -

- Yo... Bien... Hagamos otra cosa entonces, que quieres hacer? -

- Lo que tú quieras -

- Quiero seguir -

- Bakugo... -

- Bien, vamos a comprar donas, tengo ganas de comer eso desde la mañana -

- Bien... -

Los próximos cinco meses fueron iguales, el rubio pedía más cariño pero el bicolor decía que lo veía innecesario y que simplemente no le salía ser de esa manera.

Varias veces llegaron a algo más que un simple beso, pero le mayor detenía todo antes de ir demasiado lejos.

Completamente diferente al de Cállate, rubia, verdad? Jajajajaja

Kats está en modo: fallamos? Porfa.

Jajajajajaja pobrecito... Tendrá la rubia aquello que tanto desea???

Next.