El escándalo de la celebridad A y el abogado B.

Todavía estoy descubriendo, como puedo superarte.

Capitulo 11

Cómo lo había previsto, si estaba al borde del colapso.

Desde esa última vez que estuvo en el mismo lugar que su padre hace quince años, no había mantenido contacto con él y solo su hermana se ocupaba de recordarle que seguía teniendo un progenitor viviendo en alguna parte del planeta.

Al final fue trasladado a la planta de subgerentes recién inaugurada, en su pensamiento ya traumatizado posiblemente debido a su causa, porque desde que cumplió la mayoría de edad hace cuatro años, Jiang Fengmian había tratado de nuevo de entablar lazos con él.

Siempre había funcionado en deshacerse de sus regalos materiales, para su cumpleaños número veintidós le había comprado una casa en la zona rica de la ciudad, su madre en esa ocasión se puso más histérica que de costumbre y algo de ello se le quedó implantando por qué también no pudo contener su enojo.

Nada de ello, ni, aunque se disculpara mil vidas podría hacer que le perdonara por todo el daño que le causó cuando vivió con él en Florida. 

Solo un milagro de la vida, le haría perdonarlo sinceramente y dejarlo ir sin rencores atornillando su alma.

Después de dejar a Jin Ling en la casa de sus padres, Jiang Cheng se dirigió a la residencia privada de Wei Wuxian.

Al mandar un mensaje de texto de que estaba a solo una calle de llegar, Wei Wuxian le respondió con un emoji sonriente.

Al llegar, una vez que abrió la cerradura y desactivo todas las alarmas como siempre acostumbraba, rápidamente fue llevado a un salón aparte por un nervioso Wei Wuxian y luego de tardarse cerca de una hora, Wei Wuxian volvió por él cuando verificaba las nuevas formas de trabajo que su nuevo jefe le había dado tal y como correspondía enseñarle al recién llegado. Jiang Cheng se guardó el folder en su maletín y prosiguió con su rutina.

Consistía firmemente en solo acordar los límites del sobreesfuerzo, alguna que otra incongruencia del nuevo equipo de trabajo y como les resultaría los horarios para acomodarse y no tener alguna inconveniencia por parte de ellos, ahora que había sido transferido a otra sucursal y por ende ya no bastaría con solo pedir días libres para ir a cumplir con el tratado de acuerdo de la corporación de abogados en Huangpu.

Wei Wuxian asimiló todo esto con una copa de vino en su mano y sondeándola levemente sentado en su usual sillón individual, Jiang Cheng dejó un espacio en su agenda para que pudiera descansar un día a la semana o en verdad se terminaría por cambiarse de nombre y apellido, para no saber nada más sobre las erradas cosas que hacía su padre por él, cosas que no le ayudaban en lo absoluto y solo lo perjudicaban más de la cuenta.

Al parecer su desanimo estaba visiblemente reflejado, cuando acordaron todo y pusieron en orden sus indiferencias, Wei Wuxian más calmado de lo que se había puesto antes, le aconsejó que también se relajara junto a él en la sala extravagante que abarcaba un espacio moderado en el salón donde ahora estaban planificando las cosas.

De un solo acto, Jiang Cheng se negó rotundamente y el cielo crispó en estruendosos truenos su intranquilidad en cuanto Wei Wuxian le tendió una copa de vino y no solo se detuvo ahí, sino que también se fue acercando hasta que su brazo le había rodeado parte de su cintura y estaba tan cerca que podía olerle el delicioso aroma del perfume que siempre usaba Wei Wuxian impregnado en la camisa.