El Mejor

PRÓLOGO

-¡Jugaste conmigo!- Veo tus lágrimas tratando de salir, ni siquiera puedo procesar todo lo que está pasando en este momento -¡No quiero volver a saber de ti!- Gritas partiendo mi corazón, partiendo el tuyo.

¿Cómo llegué a esto? Ni siquiera puedo pensar en alguna respuesta, detenerte, explicarte que cada beso, cada sonrisa, cada caricia fue real, que al principio me acerque por ganar un reconocimiento que no vale la pena, por querer demostrar que yo siempre soy el mejor en todo, pero que al final termine tan jodido por ti.

¿Cómo puedo hacer que te quedes? Veo como lanzas la pintura que prometiste hacer para mí, la que había decidido enmarcar y colocar frente a mi cama y así poder recordar todo el amor que nos tenemos.

¿Qué debo hacer? Tú me sigues gritando cuánto me odias y yo sigo sin poder mover ningún músculo de mi cuerpo, mi boca no sirve, mis manos no te detienen, mi ojos solo te ven alejándote de mí mientras dejan salir lágrimas y mi corazón estoy seguro que dejó de latir en el momento que escuche tu voz.

-Gun- Susurró tu nombre aún parado en los pasillos logrando por primera vez que mi boca funcionará, mientras que todos me están viendo.

Recojo ese cuadro que tanto empeño le habías puesto especialmente para mí, es hermoso como cada cosa que creas, como la sonrisa que siempre me haz regalado y que tal vez se la vayas a dedicar a alguien más.

-¡Gun!- Gritó tu nombre, mientras corro detrás de ti siento mis lágrimas saliendo aún, necesito encontrarte, necesito tu perdón ¿Puedes quedarte a mi lado? Por favor, di que sí.

¿Cómo llegué a esto…?