Treinta y Nueve

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¡ENCUENTREN A ESA MALDITA RATA! - labró con fuerza -

El jefe del clan Uktena se había dado cuenta que tenía talvez un infiltrado en su clan, uno de sus guardias había reportado que durante el cambio de guardia de esa noche creyó haber escuchado sonidos en una parte de las murallas y al revisar la primera vez no había visto nada sospechosos, pero tenía una cierta desconfianza, así que después de 15 minutos reviso una segunda vez, se llevó una gran sorpresa, al ver que en la tierra había muchas pisadas.

Al intentar buscar el aroma solo pudo percibir uno, leche materna, el infiltrado era un Omega en estado, dió el reporte al jefe del clan y ahora un gran grupo de Alfas buscaba al infiltrado con desesperación, revisaron desde la puerta principal hasta la última cabaña de la zona principal, muy a su pesar no había rastro alguno.

X: señor, no tenemos rastro del infiltrado - se acercó al jefe quien tenía una mirada sicópata -

Jae: busquenlo en el bosque, no olviden revisar cada maldito lugar, lo quiero vivo

Para que un Omega en estado entrara a ese clan debía tener suficiente valor, Jae estaba tan seguro que lo encontraría y así probar su valor y valentía.

El jefe del clan camino a la única cabaña que no habían revisado, camino tranquilo, sin desesperación alguna, al ver la cabaña a lo lejos sonrió, termino de llegar a la casa y tocó la puerta, no escucho nada del otro lado de la puerta, así que con insistencia golpeó la puerta con fuerza.

A los minutos pudo escuchar movimiento, sonrió y espero un poco, escucho pisadas acercarse, se abrió la puerta con cautela y Nam vio al jefe de su clan.

Jae; buenas noches Nam - sonrió tranquilamente -

Nam: señor Park - se inclinó un poco - buenas noches, que lo trae por aquí, es muy tarde - intento sonar tranquilo -

Jae: me permites pasar

Nam: ahora?...

Jae: si, ahora - el hombre comenzaba a desesperarse, así que sin permiso alguno empujó la puerta entrando a la cabaña junto con dos hombres más -

Miro en la sala a Hobi y Tae quienes veían la tele entretenidos, en la mesita había unas cuantas cervezas y palomitas, miro hacia la tele dónde se podía ver con claridad lo que estaban viendo, una escena de una película para adultos, Jae río con gracia, puertos, pensó.

Jae: dónde está Jimin

Nam: está arriba, se sentía un poco mal

Jae: a si, que extraño, iré a ver a mi hijo

Tae: padre estará bien - se atrevió a hablar - por eso e venido, a revisar que esté bien

Jae giro sobre sus talones y antes de que pudiera hablar pudo sentir un aroma, leche materna, BINGO.

Jae: bien chicos, les diré el motivo de mi visita - sonrió - uno de mis guardias me acaba de reportar que durante el cambio de guardia un Omega en estado a entrado al clan - camino despacio por la sala - ¿que como se que está en estado? - fácil, es el único aroma que no pueden ocultar

Todos tragaron grueso.

Jae: así que estamos buscándolo, debe ser demaciado valiente para entrar al clan poniendo su vida en riesgo y la de su cachorro - hizo una breve pausa - o debe ser muy idiota

Nam gruñó bajo, pero se escuchó con claridad

Jae: que pasa Nam, no me digas que sabes dónde está el Omega - arqueo su ceja -

Nam: no, esque...

Se escuchó un fuerte golpe en la parte de arriba, todos miramos hacia arriba

Desconocidos - OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora