Secreto 6

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La zona en la que se encontraba aquel edificio no encajaba con lo que Sasuke le había contado. Se encontraban lejos de West Roxbury, donde le había dicho que residía, y aquel lugar era de todo menos un área residencial segura. La mole cuadrada y desangelada ante la que Sasuke se detuvo era relativamente moderna, mucho más, al menos, que los edificios del centro. A esas horas de la noche el lugar era especialmente siniestro, algunas farolas no funcionaban, había pocos coches aparcados junto a las aceras y parecían necesitar algunas reparaciones. La fachada del edificio tenía pintadas y muchos de los ladrillos rojos que la cubrían se habían desprendido, dándole un aspecto viejo y desgastado.

Estuvo sintiéndose mal todo el camino, preguntándose en numerosas ocasiones por qué estaba comportándose de esa manera, siguiendo a un tipo con el que se había acostado y con el que no pretendía tener nada más que buen sexo. Sin embargo, verle entrar en aquel lugar con pinta de nido de narcotraficantes le demostró que aquel no había sido un impulso irracional.

«Irracional es que me esté acostando con un tío que me ha estado siguiendo. Él ha hecho lo mismo conmigo, podría pensar que es un acosador... o algo peor. ¿Y si realmente lo es? Algo pasa con él y tengo que averiguarlo», pensó. Se arrebujó en el abrigo y caminó hacia la entrada cuando Sasuke ya había desaparecido en el interior. Esperó parapetada junto a un árbol reseco, observando el movimiento en las inmediaciones. No parecía haber camellos en las esquinas, ni coches parando para realizar compras dudosas, pero no era el mejor barrio de Boston y no entendía por qué Sasuke le había mentido al respecto de su residencia, ¿es que le avergonzaba?

Tras un tiempo prudencial, abandonó su escondite tras el árbol y se acercó al portal. Buscó a Sasuke en los timbres, pero en la botonera no venían reflejados los nombres, solo estaban los números de las puertas. Justo en ese momento, cuando se planteaba tocar a un número al azar e inventarse alguna historia para que la dejaran entrar, la luz del vestíbulo se encendió y un hombre mayor abrió la puerta con una bolsa de basura en la mano. Al verla allí plantada le dirigió un gesto inquisitivo y esperó a que la puerta se cerrara tras él.

—Ah, disculpe —dijo Sakura, inventando una excusa con rapidez—, soy la hermana de Sasuke Uchiha, no recuerdo su piso, ¿podría decirme cuál es? 

El viejo la miró con un gesto hosco, como si el simple hecho de que se dirigiera a él le molestara.

—Aquí no vive ningún Sasuke —respondió con aspereza, iba a continuar su camino, pero Sakura volvió a hablarle. 

—Sí, sí, claro que vive aquí. Tal vez no lo recuerde por el nombre. Es irlandés, alto, moreno, con los ojos oscuros... Bueno, negros —se corrigió—. Tiene un color de ojos muy peculiar, ¿no le resulta familiar nadie así?  

Según le describía, el hombre fue frunciendo el ceño hasta que su actitud desagradable se transformó directamente en una actitud hostil. 

—Márchate de aquí —sentenció. 

Sakura sintió que se le hacía un nudo en el estómago. El hombre había reconocido a Sasuke, su cambio repentino de actitud se lo confirmaba y eso era más que inquietante, ¿qué ocultaba para que aquel desconocido reaccionase así al reconocerle?

—Por favor, soy su hermana y tengo que hablar con él —suplicó intentando apelar a la empatía del hombre, pero este negó con la cabeza. 

—Me da igual quién seas, ese tipo es peligroso. Vete y no vuelvas jamás por aquí —espetó desagradablemente—. Este sitio no es para muchachas como tú. 

El viejo la miró directamente, asegurándose de que le había escuchado antes de seguir su camino sin volver a mirarla. Sakura se quedó allí de pie, observando la puerta de hierro y vidrio opaco tras la que había desaparecido Sasuke minutos atrás, con las preguntas zumbando en su mente como un avispero. Un miedo repentino se cerró en su estómago y la hizo mirar a su alrededor, temerosa de la oscuridad de la calle. Pensó en el hombre que la había asaltado noches atrás, en uno de los lugares más seguros y exclusivos de Boston, y se preguntó si la necesidad de sentirse segura en ese momento no la había empujado a un error fatal. 

El Secreto de 🔒 S A K U R A ✨ [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora