Capitulo 4

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Fighter y Healer fueron enviadas lejos por una ola de energía proveniente de uno de esos seres, ambas habían logrado alejar a los cuatro seres más poderosos del palacio, pero estaban sufriendo las consecuencias de su atrevimiento pues estaban gravemente heridas y no veían una manera de salir vencedoras.

Ambas intercambiaron miradas, sabían que no iban a sobrevivir... así que decidieron atacar conjuntamente y cuerpo a cuerpo con la intención de acabar con el único de los cuatro seres que quedaba y que era el qué más problemas les estaba causando.

En la mirada de ambas, se reflejó la decisión, pero también había un brillo de tristeza mezclado con algo que no se podía entender muy bien pero que si conocías a las dos guerreras sabrías que era alivio, pues ambas pensabas que al morir por fin podrían descansar y quizás reencontrarse con las chicas que fueron sus amores en el pasado y a las que habían perdido hacia más de catorce años.

Su poder aún unido fue insuficiente y justo cuando el enemigo se disponía a rematarlas, ambas fueron sorprendidas por una intensa ola de poder que mando a volar al ser que las estaba atacando.

- ¡Quita tus manos de nuestras amigas! – exclamó una voz que ambas reconocieron, causando pánico en las dos experimentadas guerreras.

- Somos estrellas brillantes que lucharán para proteger a sus seres queridos – dijo la otra voz que también conocían.

- Somos Sailor Gemini – dijeron ambas voces simultaneas – Y no permitiremos que acaben con más estrellas.

Las dos niñas de catorce años, saltaron enfrente de sus amigas sin ver los rostros de pánico de estas. Ese ser contra el qué habían estado luchando las Starlights, se alzó del suelo mientras se relamía sus grotescos labios.

- ¡Qué delicioso brillo poséis, pequeñas! – dijo con una voz aún más repugnante que sus labios. – Sois muy valientes, una pena... qué no vais a crecer para poder demostrarlo.

- ¡Lárguense de aquí, Usagi!¡Minako! – exclamaron Fighter y Healer a la vez mientras trataban de levantarse para proteger con sus cuerpos a las niñas que adoraban.

El esbirro de Scardis atacó con una potente ola de energía oscura, antes de que Fighter y Healer pudieran hacer nada por cubrir a las pequeñas así que ambas Starlights gritaron con miedo desde el fondo de sus corazones. No podían permitirse perder a otras personas que querían.

Las dos niñas no se inmutaron solo juntaron sus manos y una luz las cubrió mientras simultáneamente lanzaban su ataque.

- ¡Hermoso brillo de las estrellas gemelas!¡Fulmina! – dijeron ambas a la vez

La luz que las rodeaba se proyecto como un enorme haz, que hizo gritar con terror al enemigo y que curo las heridas de las Starlights detrás de las pequeñas. Pero cuando la luz se extinguió, ambas niñas cayeron desmayadas, sin su transformación, a los brazos de Healer y Fighter que miraban conmocionados a los restos del enemigo y como sus heridas habían sido curadas.

Las dos Starlights cargaron en sus brazos a las niñas, y huyeron a toda velocidad al palacio para evitar que algún enemigo más las atacara además de conseguir un médico que las revisara.

- ¡Maker! – exclamó Fighter al ver a su hermana cerca de la enfermería – Necesitamos que las revisen ¡ahora!

- ¿Qué diablos hacen las hijas de Galaxia aquí? – exclamó Maker conmocionada de ver a las pequeñas inconscientes en los brazos de sus hermanas.

El doctor les informó de que las pequeñas solo necesitaban descansar así que fueron llevadas en brazos al dormitorio que tenían en el palacio. Pero en esta ocasión ni Fighter ni Healer se alejaron de ellas, estaban muy preocupadas por las pequeñas que les habían salvado la vida.

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