Andyler Un Amor Prohibido

Capitulo 37

Alejandro estaba un poco desconcertado y aturdido, en fin, una parte de él lo sabía y lo sospechaba desde un inicio pero mantenía la "esperanza" de que su bonita pudiera enamorarse de él... Se dirigió hasta la habitación que le habían asignado, suspiró, sabía que eso era el fin y que al pasar por esa puerta habrían terminado su relación

-Bonita ¿Cómo te sientes?

-Bien, ya me siento mucho mejor- Alejandro no la miraba a los ojos, esquivaba su mirada a toda costa, cosa que le extrañó- ¿Pasa algo? Te noto algo raro

-Es que te tengo que decir algo, una notici...

-Alejandro, ¿Qué pasa? No me asustes, ¡Lo que sea que me quieras decir dímelo ya!

-Tranquila que esto que te voy a decir es algo bueno- Sonrió ligeramente

-¿Ah si?, pues dudo que en estos momentos algo me pueda poner feliz

-Mmm... Yo creo que si

-Bueno, ya dime por favor- Se impacientó

-Camino hacia ella y colocó suavemente su mano sobre su vientre, hizo una ligera caricia y sonrió- Andy- Tomó aire- Estás embarazada

"Estás embarazada" esas dos palabras retumbaron por la cabeza de Andrea, estaba demasiado sorprendida, no imaginó que le diría eso, podía esperarse cualquier otra cosa. Una enorme sonrisa se reflejó en su rostro y las lágrimas empezaron a caer por sus mejillas

-¿E.. Embarazada?- Estaba demasiado conmocionada

-Si- Sonrió al presenciar su felicidad, si ella era feliz, él también lo sería...

-No lo puedo creer- Tapó con una mano sus labios- Dios mío ¿Estás seguro?

-El doctor me lo dijo... Ahora tienes una razón más para luchar

-A su mente se le cruzó una pregunta-¿Cuántos... Cuántos meses tie...?

-Ese bebé es una razón más para Luchar... Por él

-Bajo la cabeza, se sentió tan mal que ni siquiera lo pudo mirar a los ojos- Yo...

-No digas nada, yo sé que lo amas, que él es el amor de tu vida y no pienso interponerme entre ustedes dos- La miró y le secó las lágrimas que caían nuevamente por sus mejillas
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Por otro lado, él estaba caminando por las calles de la ciudad sin rumbo alguno, en su mente rondaban aquellas imágenes, aquellos momentos en los que estuvieron juntos, las veces que se tragó sus mentiras y como le veía la cara de idiota, ¿Cómo pudo confiar en ella? ¿Por qué no se hizo un ADN desde el principio? Era demasiado ingenuo, ahora había aprendido a no confiar en cualquiera ¿No?... Entre más pensaba, más se iba dando cuenta de que todo era una mentira y nunca quiso ver las señales que le deban, quizás porque deseaba tanto el calor de un hogar, el amor de una familia, no importaba como... Él lo quería tener... Pero ahora lo había perdido para siempre, y por si eso fuera poco, no podía odiarla ni mucho menos dejar de amarla, lo había lastimado pero sus sentimientos por ella no podían cambiar. Pensó en llamar a Rodrigo, pero se acordó que tenía una "buena amiga" Olinka...

Tocó la puerta del departamento

-Voy, ya voy... ¿Tyler? ¿Qué haces aquí?- Notó sus ojos hinchados y eso le preocupó bastante- Pasa-  Con la cabeza cabizbaja entró al departamento sin decir ninguna palabra