¿Qué Significa El Arte? *sasodei*

Recuerdos

¿Sabes qué pienso?

Que ni los errores que cometemos, ni las heridas que recibimos, son algo que luego tapándolo, podemos hacer desaparecer.

Yo por mucho que me duele, seguiré llamando tu nombre...
Hasta que me respondas.

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—Deidara-senpai.

El enmascarado desde hace bastante tiempo venia llamando al rubio, pero sus súplicas jamás eran atendidas tan solo lo esquivaba.

Pasaban por una aldea hacía la guarida de Akatsuki, ya que la bestia de dos colas había sido capturada. Realmente pasar por aquel lugar era nadamás para evitar cualquier comentario o acercamiento con su compañero.

Tobi al ver que nada lo que hacía daba frutos decidió quedar callado, pero aún así su vista seguía en la persona que tenía caminado al frente suyo.

El rubio al no escuchar desde hace un tiempo ningún tipo de interrupción, pensó que Tobi se había perdido, al decir verdad era lo que más quería.

"Diré que murió en combate, así estaré por fin solo. Y, en paz." Pensó en eso mientras una media sonrisa surcava su rostro, más no le duró mucho el gusto.

—¡Deidara-senpai!— corrió el chico mientras lo llamaba haciendo un verdadero escándalo.

El mencionado solo hizo más notable el enojo en su rostro, a la vez que sentía vergüenza por estar con una persona como él.

—¡Maldita sea Tobi, cállate!— lo golpeó en el abdomen para hacerlo caer antes que lo abrazará.

—Senpai, si que eres malo con Tobi.

—Si, si. Ya vamos— voltio sin notar que su compañero ya lo tomaba de la capa —¡Quita tus sucias manos de mí!. ¡Ya vamos Tobi, me has quitado vastante... !.

Sus palabras quedaron ahí, sin más se dejó arrastrar.

Unos minutos después estaban en los lugares donde vendían ingredientes para cualquier tipo de postres.

—¿Por qué demonios me arrastraste hasta aquí?— cruzo sus brazos mientras volvía a caminar hacía el otro lado.

El enmascarado lo intercepto poniéndose de frente, a la vez que juntaba sus manos para que siguiera ahí.

—Vamos Senpai, Tobi solo le quiere preparar galletas.

Su rostro se transformó en una leve sorpresa, sin hacerla notoria.

—Espéreme aquí Senpai, Tobi traerá los ingredientes para hacerle unas ricas galletas.

Sin más el chico se adentro a la tienda, dando leves brinquitos.

—¿Galletas?— susurro para sí.

[...]

"—Sasori-Danna— lo llamo con una sonrisa boba, de esas que siempre les solía dar.

—Si.

—¿Qué le parece si hoy hago galletas?.

Él se quedó estático por un momento, hace tiempo no comía algo parecido a aquello. Alzó la vista para mirara el azul único del ojo de la persona que tenía enfrente, tan claro y brillante.

Una media sonrisa se curvo en sus labios. Al levantarse del asiento de su escritorio, dió un pequeño beso en la mejilla del otro.

—Vamos, yo te ayudo a hacerlas.