𝐶𝑎𝑝𝑖𝑡𝑢𝑙𝑜 𝟽

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─¡Mierda!

Gritó sin contener las lágrimas, lanzó las sábanas a un lado luego de tratar de calmar el calor con agua,era un simple celo como cada dos meses,pero la excepción era clara, necesitaba a su destinado,necesitaba de su alfa,su calor y tacto.

─¡Maldita sea!

Nuevamente volvió a soltar,el dolor era agudo, pegó puñetazos a la almohada de plumas creyendo que en el intento de alguna manera aliviaría su dolor.

Sus pómulos estaba enrojecidos,su frente y espalda estaban cubiertas de sudor,sobre todo su parte baja,al grado de que su interior era atormentando con martillazos.

El aire se escapaba de sus labios,en cualquier momento perdería la cabeza, resopló después de consecutiva vez airear su camisón con imprudencia.

Nisiquiera una brisa de aire se hacía presente en la habitación,ventanas y mucho menos huecos podrían haber en la casa de sirvientas, nisiquiera la desaliñada madera que parecía quedar con estillas en la pared podía crear un hoyo.

De esa manera,el calor encerrado en la habitación creó junto a las feromonas un ambiente deseoso para cualquier alfa que pasará por la zona,como si pudiera empeorar, irremediablemente estaban demasiado escandalosas,una omega que no contenía aroma era visto como milagro que pudiera manifestar feromonas de tal manera.

Fuera del cuarto,era lógico que el aroma de coco se desbordase por las esquinillas de la puerta de madera,por suerte no se había esparcido más allá de la zona,alfas podrían verse atraídos hacía su aroma y no resultaría en buenos temas.

La mayoría de sus compañeras y compañeros eran betas,pero como excepciones que hay,ella junto a un chico y otra chica eran los únicos de clase Omega.

Y como encargada de los jardines,no podías faltar a tus deberes,Miku estaba informada de la situación,por lo tanto dejó temporalmente a Abel encargado de tu puesto.

Abel como Omega que era,lo conociste semanas atrás después de haber hablado con Miku mientras comían bocadillos.

Sin duda era precioso,su cabello tan claro y oscuro como una nuez tenían un gran atractivo a pesar de ser un color tan común,era tan blanco como la leche,pero sobre todo su físico era digno de un Omega, pequeño y delgado.

Lo conociste sin querer al tropezar con él,se disculparon y no pudieron evitar conversar un poco,desde ese momento quédaste maravillada.

" Que Omega tan hermoso "

Fue lo primero que pensaste al cruzar miradas,y como siempre tan tú, sonreíste cálidamente mientras extendias tu mano.

Desde aquél momento, tú junto a Abel y Lucia, amiga de él, entablaron amistad.

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─______,voy a entrar

Seguida de aquella voz tan refinada escuchaste el sonido de los dedos sonar en la madera.

─¿Cómo te encuentras ahora?

Preguntó Miku al entrar y cerrar la puerta,seguido de verte destapar parte la sábana que te cubría,era ilógico ya que tenías calor, así que sin razón alguna pensaste que calor más calor te haría olvidarte del celo,como si no tuvieras dolor para nada.

─No te preocupes Miku, ésto pasará

¿Qué?,¿cómo no preocuparme por mi preciada amiga?

─Está bien,no pasa nada

─¿Cuánto dura tu celo?

Preguntó, no podías engañarla.

─Tres semanas...

─¿¡QUÉ!?,¿¿tanto así??

Suspiraste resignada, sabías que recordarlo no haría nada para aliviarte el estrés.

Viste como Miku pensaba seriamente,no la interrumpiste y esperaste pacientemente.

─Toma

─¿Y.. ésto qué es..?

Es un inibidor,te ayudará con el celo,pensaba dártelo antes de que comenzará tu ciclo,ya que sé que es molesto diliar con ello,yo como beta no las puedo usar,sin embargo pude conseguir algunas para mi amiga

Miraste su mano,aquella pastilla que era un lujo conseguir,la sostenía sin ningún apuro y importancia.

─Muchas gracias Miku...

No hay de qué cariño,todo por ti

Observaste cómo salía de la habitación luego de despedirse de tí con la mano junto una dulce sonrisa que alivió tu cabeza.

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Un muy curioso hombre de aspecto soñador e iluminoso,se acercó a la banca dónde siempre solía encontrarte sentada.

Observó el banco de piedra largo y se sentó en el.

─Debería de llegar en unos minutos..

Vociferó en voz baja,esperando pacientemente a que llegara la dama.

─Ella no pudo venir,si lo que quieres saber es dónde está,ella está en su ciclo,no podrá trabajar durante un tiempo

─¿Te conozco?

─No,pero sé que son cercanos,por eso te lo digo

Observó el rostro del caballero Oliver mientras se cruzaba de brazos.

─Ya veo.., gracias por decirmélo

Enseguida se levantó de la banca y se acomodó la espada que portaba de su cadera como signo de respeto que como todo caballero del reino de Azuli debía de enfundar.

─Espera un momento,¿estás ocupado?

─Lo siento,lo estoy,de todo modos hasta luego

El tono seco del caballero era pronunciado,el tema en el que no se vea ______ involucrada le daba igual,sus acciones eran sutiles,pero la manera en que siempre mantenía la mirada para verte estaba fuera de su lugar como caballero.

Se fué de ahí.

Abel parecía tener intenciones extrañas...

La molestia que expresaba al hablar de ______ con el caballero Oliver lo parecía sosegar sin darse cuenta.

La mirada con la que sus ojos brillaban al hablar de la señorita era irritante de observar.

Como si su mundo fuera ella.

Cómo si nada le importase, sólo la señorita ______.

Era irritante para él.

Se lo estaba quitando.

Y él,no lo hiba a permitir.

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❥ 𝑂𝑚𝑒𝑔𝑎𝑣𝑒𝑟𝑠𝑒~ 𝑳𝒆𝒏 𝒙 𝑹𝒆𝒂𝒅𝒆𝒓 ❀ Segundɑ temporɑdɑ ❀ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora