💜Hola aqui les traigo esta historia completamente mía en versión Jihope💜
Donde Jimin tendrá que aprender a vivir con una bola de pelos apestosa y con su desastroso novio embarazado.
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—¿Gemelos?—. Preguntó atónito ante lo que el médico frente a ellos dictaba.
La pareja miraba fijamente la pantalla, donde de forma poco clara se veía dos ya no tan pequeños fetos en proceso de formación. La sorpresa era demasiada grande, Jimin no podía evitar sentir que todos los temores y la felicidad del mundo lo carcomían al mismo tiempo. Hoseok tampoco podía evitar sentir la felicidad de tener dos criaturas en su vientre.
Dos pequeños a los cuales estaba esperando con mucha emoción, las lagrimas surcando de los ojos menores mientras se perdían explorando cada parte de sus bebés plasmados en aquella pantalla.
—Mellizos probablemente. Forman parte de dos placentas diferentes—. Informa el sonriente médico repasando con la mirada la pantalla.
—¿Diferencia?—. Preguntó el curioso Hoseok con lagrimas recorriendo sus mejillas y una sonrisa plasmada en sus labios.
Jimin miro al doctor en busca de una respuesta y éste sonrió ante los curiosos padres primerizos.
—Los gemelos son completamente iguales en físico. Los mellizos en cambio comparten similitudes, pero también diferencias –. Dice limpiando el resto de gel en el vientre ajeno.
Jimin y Hoseok compartieron una dulce mirada asintiendo ante aquello que los hacia muy feliz.
Jimin sabía con seguridad que no sólo serian tres ahora a los que tenia que proteger, serian cuatro. Bebés preciosos a los cuales iba a cuidar con su vida. Al diablo todo lo demás. Jimin se encargaría de consentir a sus cuatro amores, porque Hobi también era su bebé aunque no lo admitiría nunca.
Aquel gato ya era parte de la vida de ellos y no podían dejarlo de lado.
—Le tome unas cuantas fotos a los bebés por si gustan tenerlas—. Hoseok asintió de forma emocionada mientras su novio lo ayudaba a reincorporarse– ¿Cómo van los síntomas?—. Preguntó haciéndole fruncir el ceño al ahora pelirrojo.
Hoseok soltó una enorme carcajada ante aquello, su pobre novio no había vomitado últimamente, pero si a tenido una que otra nausea.
—Controlado—. Suelta con una leve molestia haciendo reír a su pareja y al médico.
—¿Son muy pesados?—. Volvió a preguntar mirando al padre.
—Terribles—. Afirmó soltando un suspiro mientras se levantaba de la silla.
—¿Quisieras volver a tenerlos?—. Hoseok lo miro con curiosidad al igual que el médico.
—Con tal de que no los sufra mi pequeño, yo puedo con todo—. Aseguró dándole un pequeño beso al menor en sus nudillos.
Hoseok no pudo evitar sonreír mostrando sus bellos hoyuelos ante aquello, el rubor tomo color sobre sus mejillas y las palabras le hicieron latir su corazón. No había mentira, arrepentimiento, obligación, nada negativo en aquello. Jimin era de por más sincero, no le importaría volver a tener los síntomas de un embarazo si eso evitaría que Hoseok los sufriera.
