Habíamos quedado en un restaurante de comida mediterránea cerca del teatro de La Scala. Es uno de los teatros de ópera más famosos del mundo y estaba muy bien ubicado ya que se encontraba cerca de una plaza donde mucha gente se reunía. Podías contemplar a niños jugando, a señores mayores leyendo el periódico, a mamás paseando con sus carritos de bebés... Cada vez que venía por aquí me gustaba imaginar las vidas de estas personas que seguramente eran tan diferentes a la mía.
Nada más ver a Carlotta la abracé y le di dos sonoros besos. Ella por su parte me agarró de la cintura y caminamos juntas hacia el restaurante. Tras sentarnos y pedir la comida correspondiente para cada una le comenté el mensaje que mi representante me había mandado esta misma mañana.
- No sé que hacer. Sé que le he dicho que sí, que iría al programa de Verissimo pero estoy agobiada. No sobre mi relación con Andrea, eso lo puedo manejar, sino porque no sé qué es lo que me va a preguntar sobre Dayane.
Mi cara de frustración se reflejó en el rostro de Carlotta. Ella sabía todo acerca de mi relación con Dayane, había sido mi confidente durante los últimos meses y solo ella podría aconsejarme qué hacer.
- Rosa, es una muy buena oportunidad de volver a la televisión. Era lo que querías. Sé que solo es una entrevista, pero puede que te vuelvan a llamar para otros trabajos y que la gente no se olvide de ti. – Carlotta intentaba animarme con buenas palabras, pero yo sabía que no había terminado con su explicación. – En cuanto a lo que te puedan preguntar sobre Dayane, solo puedes hacer una cosa y es sincerarte. Diles la verdad, que no tenéis relación y que no has vuelto a hablar con ella desde las dos últimas semanas después de salir de la casa. Que ella intentó contactar contigo alguna que otra vez pero que tú la rechazaste.
Estas palabras de mi amiga no me gustaron nada, mi cara se volvió roja por completo por culpa de lo que había dicho. Yo no estaba a dispuesta a exponerme así delante de toda Italia. Yo estaba dolida y Carlotta lo sabía. Sabía el por qué no había devuelto sus mensajes ni contestado sus llamadas, creía que Dayane me había mentido acerca de sus sentimientos cuando se declaró en la puntata.
- ¡No puedo hacer eso Carlotta! No puedo decir que no me hablo con Dayane porque he sido yo la que no ha querido. ¿Sabes que se me echaría todo el mundo encima incluidas mis fans? Muchas de ellas todavía tienen la esperanza de que lo arreglemos.
Respiré hondo porque me había alterado. No quería que nadie me inculpase, yo sabía que la había cagado con este tema, que me había acobardado cuando se sinceró sobre sus sentimientos y no lo quise reconocer en su momento.
- Puedes hacer eso si quieres recuperarla. Yo sé que la echas de menos. Por lo menos piénsatelo, es tu última baza. Puedes reconocer tus errores delante de todo el mundo e intentar reconciliarte contigo misma.
- No lo sé. No sé que hacer.
Una lágrima se escapó de mi ojo y con ella vinieron las siguientes. Carlotta me sujetó las manos. Ella sabía que lloraba de impotencia y de rabia.
- No hace falta que digas todo lo que sientes, simplemente solo que te equivocaste y que la quieres de verdad. Tiende una mano a la reconciliación, lo necesitas.
Terminamos la comida y me fui a mi casa. Había decidido que estaría en el programa y que sería sincera acerca de mis sentimientos por primera vez en televisión. Quería que Dayane viese la entrevista y que pudiese ablandar su corazón. Yo sabía que me odiaba, me había dejado de seguir por redes sociales y me había bloqueado del Whattsap. No sé si ella sabría algo sobre mi vida, pero yo sí que había indagado sobre la suya. Me había creado una cuenta independiente para poder seguir sus pasos. Sé que seguía soltera, aunque había escuchado y leído en prensa que había tenido relaciones esporádicas tanto con hombres como con mujeres, por una parte, envidiaba su libertad, poder hacer lo que quieres sin dar explicaciones y vivir plenamente tu sexualidad. A Dayane le iba extremadamente bien, se había alejado del mundo de la televisión, pero había seguido trabajando del modelaje realizado multitud de colaboraciones con marcas importantes como Dior o Chanel. No creo que todo ello se le hubiese subido a la cabeza porque según había investigado seguía viviendo en la ciudad de Como con Sofía, su hija.
Solo de pensar en Sofía se me hace un nudo en la garganta. A veces recuerdo los planes que hicimos en la casa de Grande Fratello. Dayane con toda la ilusión del mundo me había propuesto vivir con ella y con su hija. Al principio ni me lo pensé, le dije que sí. Si a vivir con ella y con Sofía. Empezamos a hacer planes de futuro, pero entonces pasó lo de Zenga y todas las promesas que le hice se rompieron por mi culpa.
Eran las dos de la madrugada y no podía dormir. Me levanté a por un vaso de agua y revisé mi Instagram. Nuevas menciones de fans inundaban mi teléfono con mi aparición en un programa después de meses de ausencia. Empecé a leer comentarios en la publicación de Verissimo y aunque había algún que otro comentario positivo la mayoría eran de desconformidad por mi participación. Cerré la aplicación y me fui a la cama junto Andrea. Mañana sería un día duro.
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Rosmello - La última oportunidad
FanfictionEs la última oportunidad de Rosalinda de recuperar lo que más desea.