Veinte Almas

Capitulo Quince

Harmony Wright

—Gracias por salvarme—digo con voz quebrada por anteriormente haber llorado mientras me separo lentamente de él.

— ¿Estás bien? —me mira con preocupación. —Me asusté mucho al oír tu grito y luego te vi ahí en el suelo llorando y fue peor ¿Qué ocurrió aquí, solecito?

—Aquí había alguien —murmuro. — Venía por mi ,no se que habría pasado si no hubieras llegado a tiempo, pensé que iba a morir.

—No voy a dejar que nada te ocurra—susurra cerca de mi oído.—Además sigo diciendo que te hubieran traído de vuelta cuando empezarás a hablar— bromea para aligerar el ambiente.

Me separó de él y le doy un manotazo mientras suelto una pequeña carcajada.

—Idiota.

—Tu idiota, solecito—suelta burlón.

—No, gracias—claro que quieres mentirosa,solo te imaginas que podría pasar,como podría hacerte gemir con esas manos, lo bien  que te haría sentir— tragó saliva y alejo esos sucios pensamientos mientras siento mis mejillas enrojecerse.

Joder casi me matan y mis hormonas solo piensan en sexo, estoy muy mal.

El se coloca de pie y me extiende la mano para que pueda levantarme ,no me hago de rogar y la tomó. Al estar ya levantada me sacudo el pantalón y me agarró de su brazo para salir de aquí, aún con cierto temor de que puede estar rondando a nuestro alrededor. Al llegar a la sala puedo ver por la luz de la linterna de él que no hay nadie. El nota mi mirada y me explica que los demás ya están afuera.

Sam al verme se aproxima a abrazarme y me pregunta si estoy bien, la tranquilizó y miento diciendo que solo fue un susto y que estoy bien. Las demás vienen hacia mí y luego de revisarme toda la cara me dejan respirar de nuevo.

—Nena, estás temblando—dice Peigh mientras me coloca su gorro de lana en mi cabeza.

Siento como colocan una chaqueta en mis hombros y volteo a ver quién fue el responsable. Sonrió al platinado y le susurro un "Gracias".

Sam se excusa diciendo que debe hacer algo, le insisto que la puedo acompañar, ya que es peligroso e incluso Peigh se ofrece a lo que la peli violeta se niega, ella solo se despide de nosotros bajo mi atenta mirada, los chicos se entretienen planeando que harán al ser apenas las 9 de la noche pero mi vista sigue fija en mi amiga y suelto un suspiro cansado al ver a Owen llegar a su encuentro y ambos yéndose de ahí y noto que no fui la única que se dio cuenta.

—John —el nombrado solo me ve con gesto decaído—¿Quieres ir a la sala de cine? aun es temprano, por fis—le ruego intentándolo distraer.

El suelta un suspiro y luego me ve con una sonrisa, asintiendo.

—¿Chicas quieren hacer noche de películas?— le pregunto al trió que están discutiendo sobre algo que no logro oír, ellas asienten y empiezan a adelantarse agarrando a John y arrastrándolo con ellas.

Volteo nerviosamente y me giro a encarar al platinado.

—¿Quieres ser mi cita?solo por hoy, no te emociones—el suelta una carcajada—tómalo como un agradecimiento.

—Me parece bien señorita, por cierto déjeme decirle que mi chaqueta le queda mejor que a mi— me sonrojo inmediatamente y me alegra que sea de noche.

—Tonto, cállate o voy a arrepentirme de esto.

—Ya no hay vuelta atrás— suelta para acercarse a mi y levantarme como un saco de papas y empezar a caminar hacia la sala de cine mientras me voy quejando.