LA MALDICIÓN DE LÍA [2HWANG]

Extra 01

— ¡Tan caliente! — renegó Yeji mientras sostenía algunas bolsas.

Ella y Hyunjin habían salido esa mañana al mercado para comprar la despensa de la semana, pero como la chica se lo temía, ir a esa guerra de rebajas les tomó demasiado tiempo.

—Hyunjin, ¿podemos ir a ese convini por algo de beber y comer? — pidió señalando la tienda a unos cuantos metros, si no se refrescaba e ingería algo podría morir antes de llegar a casa.

—Ah, está bien— aceptó el chico sin más.

Yeji observó de reojo al castaño, él no se veía tan afectado como creía que lo estaría, incluso llevaba la mayor parte de compras en sus manos, se estaba acostumbrado mejor de lo que pensó a ese tipo de vida.

En cuanto entraron a la tienda, los chicos entrecerraron los ojos, sintiendo la agradable sensación del aire acondicionado.

—¡Aquí está! ¡Té de dos litros! — soltó la chica acercándose a la nevera para tomar una enorme botella de té.

—Ah... No estarás pensando en llevar esa cosa contigo ¿cierto? — cuestionó el chico agobiado, sus brazos ya estaban lo suficientemente ocupados.

Yeji le sonrió en respuesta.

—¿Qué piensas? — preguntó Yeji señalando el precio— Aquí, si compro dos o más obtendremos el 10% de descuento, será mejor que los compre como medida contra el calor.

—Bien... — Hyunjin suspiró, cuando Yeji veía rebajas era imposible hacerla desistir.

—Uhm... el té cuesta 1.79 dólares... y los onigiris para ambos 1.90 dólares... eso sería...— Yeji comenzó a hacer cuentas usando sus dedos.

—3.99 dólares incluido el tax — inquirió Hyunjin a su lado.

—Oh ¿Es eso así? Entonces están tus 500 ml, si los compramos serían...

—4.94 dólares incluido el tax.

—...¡Ah! Pero si obtenemos el descuento de las dos botellas...

—Entonces 2.68 por .0089 dólares más 1.90 multiplicado por .0098, serían 4.65 dólares incluyendo el tax— concluyó el chico al instante.

Yeji lo observó incrédula, aún no podía acostumbrarse a eso, daba miedo que su novio pareciera una calculadora.

—¿Algo está mal? — preguntó inocentemente al sentir la mirada de Yeji sobre él.

—No... muchas gracias— murmuró tomando las cosas que compraría.

...