LA MALDICIÓN DE LÍA [2HWANG]

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Ese día, pareciera que fueron a visitar solo a Lía, la madre de Hyunjin solo habló con ella, mientras él y Yeji se mantuvieron callados con la cabeza baja durante todo el tiempo que estuvieron en casa de los Choi, siendo totalmente ajenos a su alrededor, como un par de impostores.

Incluso cuando se dirigían a casa, su madre no dejó de hablar de la hermana menor.

"¿No es Lía por mucho la chica adecuada? Puede cocinar y ama a los niños, es perfectamente adecuada como esposa"

Habían estado en aquella casa por bastante tiempo, incluso el cielo que Hyunjin se mantuvo observando por la ventana del auto durante el camino de regreso ya estaba completamente teñido de negro.

"¿Esta bien que no le hayas dirigido ni una sola palabra a la hermana mayor?"

"... no te preocupes por esa chica, no parecía ser excepcional, además es más bonita Lía ¿No te parece"

Hyunjin se quedó callado, ¿como podía decir eso cuando ambas tenían el mismo rostro? Lo único que las diferenciaba eran los ojos y el corto cabello ondulado de la menor, en comparación con el largo cabello liso que tenía la hermana mayor... esa chica, la primera impresión que tuvo Hyunjin acerca de ella fue que era una mujer melancólica.

...

Todos los días, el castaño tomaba su almuerzo en la cafeteria de la empresa de su familia, y a esa misma hora, le era común que le llegaran mensajes de la chica con la que salía.

Yeji
Ayer mi hermano y yo hicimos pudín utilizando un cubo!
[Inserta imagen]

Yeji
Oh! Por cierto, este fue mi desayuno esta mañana.
[Inserta imagen]

Yeji
Y este es mi almuerzo de hoy, lo estoy comiendo Justo ahora!
[Inserta imagen]

—Está mujer...— murmuró Hyunjin mientras observaba las imágenes que Yeji le había mandado.

Parecía que no pensara en otra cosa que no fuera comida, hacía que su apetito desapareciese.

Estaba a punto de responderle, pero la voz de alguien llamándolo hizo que levantara la vista y guardara su teléfono.

—¿Hyunjin? ¡Tiempo sin verte!— exclamó el hombre que tomó lugar frente a él.

—Hola Minho.

Lee Minho, primo Segundo del castaño, y por supuesto, un integrante más del clan Shin.

—¿Y? ¿Como te va en la empresa?

—... No es tan malo.

El castaño se tomó el tiempo de pensar que tan agradable era el trabajo, concluyendo con que solo era algo más de lo que siempre hacía.

—Escuché de los ejecutivos que eres todo un estudiante de élite, estoy seguro que tu carrera te llevará al éxito.

—...Éxito— murmuró pensando en lo que significaba para el aquella palabra.

—Así es, estoy seguro de que podrás hacer lo que quieras de ahora en adelante, incluso podrías hacer inversiones extranjeras en la consultora.