¡Hey, hey, hey!
Sí, soy yo otra vez uwu si lo lees, te explico la diferencia, aunque por el título ya te haces una idea de seguro...
Créditos de la imagen: @snowlattes en Twitter
𝙴𝙽 𝙿𝚁𝙾𝙲𝙴𝚂𝙾: 01/2021
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Sus rubíes no se despegaban de la maldición a su lado mientras su mano se aferraba a la chaqueta de su pareja. Ambos estaban asustados, más él, pues no quería que su novia se viera envuelta en todo el daño que había causado Sukuna.
—Tienes que irte, Aki. —Ya te di mi respuesta, Yūji. —¡Aki, hablo en serio!
Gritó él, por primera vez. Los ojos de la chica destellaron en una clara señal de enojo, por lo cual, Itadori recibió un puñetazo directo a la nariz. Golpe tras golpe llegaba al cuerpo del chico, quien ya sin nada que hacer, dejaba a su novia soltar toda la ira y miedo que estaba experimentando en esos momentos.
—¿Qué haré si no regresas? —Aki... —¡¿Qué haré si me dicen que Yuta te ejecutó?! —Seguirás con tu vida.
El de cabellos rosados detuvo sus manos e intercambió posiciones con ella. Tenía que alejarla de alguna manera u otra, no podía permitir que Sukuna o algún hechicero la lastimaran. Ella era lo único que le quedaba para amar en el mundo.
—Yūji... —Regresa, por favor. Ve y acompaña a Kugisaki y Fushiguro. —No quiero, ¿por qué no entiendes? —Lo hago por tu bien, Aki.
Su mano se encontraba sobre la mejilla de la chica, quien ya no podía retener más sus lágrimas y terminó aferrándose a la ropa de su novio. Yūji la encerró entre sus brazos y depositó suaves besos sobre las hebras rubias.
—No puedo permitir que te lastimen por mi culpa.
Un beso en la frente y otros dos en cada mejilla.
—Eres lo más importante que tengo.
Uno en la punta de la nariz.
—Prefiero morir antes que verte lastimada o... muerta.
Finalmente, uno en los labios. Aki no se quejó ni intentó separarse, ninguno tenía la intención de hacerlo. Si esa sería la última vez en un largo tiempo que se verían, era mejor despedirse apropiadamente.
Itadori cortó el beso y dirigió su boca al cuello de su amada, justo al lado izquierdo.
—Yū... —¿Confías en mí? —S-Sí.
Un jadeo de dolor escapó de sus labios. Mas se mantuvo en silencio, sabiendo que algún comentario suyo, desembocaría las miles de lágrimas pertenecientes a Itadori Yūji.
—No regreses a buscarme, por favor. —Cuídate mucho, ¿sí? Cuida a Chōso también.
El chamán asintió antes de bajar las escaleras al lado de Chōso, posó su mirada por última vez en su novia y sonrió débilmente, ella estaba tocando la marca que había dejado en su cuello.
—¡Yū, te amo!
Itadori no volteó, por el bien de Aki no lo hizo. Tenía que arreglar su problema para regresar y hacerle saber a ella que también la amaba. Era una promesa.
—Solo espérame, Aki.
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Olvidé por completo que este libro existía :cc las actualizaciones en este mismo no serán constantes porque las ideas me llegan cada 500 años y la escuelita online me consume, así que me disculpo por eso
Pero bueno, aquí les dejo uno de Itadori, lo tenía guardado hace ya un buen tiempo.
