Capitulo 15

328 31 4
                                    

Adrien besó a Luka en la boca con entusiasmo, sus labios húmedos y sus respiraciones fusionándose entre sí, enviando calor a cada rincón de su cuerpo.

Se apartó y apoyó sus frentes juntas.

-No quiero volver a casa.

-Yo tampoco quiero-Susurró Luka, pasando el pulgar sobre los dedos de Adrien-Pero no podemos quedarnos más tiempo, cariño. Tenemos responsabilidades.

Adrien chasqueó la lengua y miró a Luka, quien también parecía un poco malhumorado. Tenían que ir al aeropuerto y tomar el vuelo de regreso a Londres. Adrien tenía escuela al día siguiente y ya sabía que no vería a Luka por unas cuantas semanas, pues siempre estaban demasiado ocupados con su trabajo.

La semana que pasaron en Francia fue fenomenal: Sexo todos los días, a veces dos veces, comieron comida deliciosa, navegaron en canoa, tomaron baño de agua calienta, pintaron, incluso hicieron alfarería... Fue increíble. Adrien estaba seguro de haber sonreído todo el tiempo. Luka se había acercado, sin querer dejar de lado a Adrien. Mantuvo al chico cerca, siempre con los brazos alrededor de su cintura o los labios en su boca.

Se habían apegado demasiado pronto, demasiado rápido. Sabían que no era algo bueno, pero no tenían la fuerza de voluntad para detenerlo.

Durante todo el viaje al aeropuerto, Adrien mantuvo la cabeza sobre el hombro de Luka mientras este le daba ocasionales besos en la frente. Afortunadamente, había una división entre los asientos traseros y el del conductor. En el avión, hablaron suavemente, intercambiando palabras e historias para recordar todos esos momentos para siempre. Cuando llegaron a Londres, el auto vino a recogerlos: el conductor de Luka los miraba serio, pero Adrien no le prestó atención, simplemente se sentó en el regazo de Luka y lo besó durante todo el camino.

-Déjalo en su casa-Ordenó Luka, y Evans asintió, pasando derecho hacia los pisos más pequeños. Adrien se quejó para si mismo, mirando a Luka con sus grandes ojos de muñeca.

-Adiós... Ven a verme pronto, por favor-Adrien susurró y Luka sonrió suavemente.

-Lo haré, lo prometo-Luka lo tranquilizó, besando su mejilla. Adrien le dio una sonrisa y salió del auto a regañadientes. Evans salió corriendo detrás y le entregó al chico su maleta, la cual tomó amablemente, dándose la vuelta para entrar a su casa.

Adrien volteó un momento para ver como el auto se alejaba, y luego, antes de que se pudiera abrir la puerta de su casa, esta se abrió sola.

-Adrien-Dijo una voz. El chico miró y frunció el ceño cuando no vio a su pequeña y azabache esposa.

-¿Nathaniel?-Preguntó, viendo al chico de cabellos rojos parado con su mano en la puerta-¿Qué estás haciendo aquí?

-¿Adrien está en casa?-Una voz sonó desde adentro, y luego Marinette corrió por el pasillo hacia la puerta, sonriendo ampliamente al ver a Adrien.-¡Adriensito! ¡Oh, estás de vuelta! ¡Te he extrañado tanto!-Jadeó, abrazándolo con fuerza.

Adrien la abrazó torpemente, tragando saliva.

-Hola, Marinette. Que bueno ver a Nathaniel aquí-Dijo y Nathaniel se echó a reír tímidamente.

-Sí, um... He estado llamando a tu teléfono durante toda la semana. No me dijiste que ibas a hacer un viaje de pesca, pensé que vendrías al pub, ¿sabes?-Nathaniel habló, haciendo su acento un poco más elegante.

-Lo siento. Debí haberlo olvidado-Dijo Adrien, dándole una pequeña sonrisa.

-Está bien. Marinette me preparó un té. Creo que me iré ahora, solo quería asegurarme de que estabas bien. Vendrás a la escuela mañana, ¿verdad? Podemos ir al pub después-Dijo Nathaniel, sonriendo. Adrien asintió, y Nathaniel se revolvió el pelo ligeramente antes de pasar junto a él para salir de su apartamento.

Alguien a quien amar (Lukadrien) ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora