La cruda verdad (Little Witch Academia)

La torre

Afuera de la torre de Luna Nova
(09:00 PM)

Nos encontramos enfrente de la torre de Luna Nova donde una bastante herida Atsuko Kagari caminaba bajo la fuerte lluvia, arrastrando su pierna izquierda y sosteniendo sus costillas derechas con su brazo izquierdo o por lo menos fue así hasta que no pudo más y callo enfrente de la entrada a la torre.

- ¡Vamos Akko! Falta poco para cumplir nuestra venganza...

- Ya... Ya no puedo más... El dolor... El agotamiento... Ya no puedo...

- Deja de hablar estupideces. ¡Levantate ahora mismo Atsuko!

- ... No puedo más...

- ¡¡¡MALDITA SEA KAGARI!!! ¡Sólo tienes que llevar tu holgazán trasero hasta lo más alto de la torre y una vez estando allí, podrás preparar el brebaje especial para recuperar tus fuerzas! ¡¡¡LEVANTATE YA!!!

En ese momento, Akko se removió un poco para poder colocar la palma de su mano en el suelo y junto a su frente, poder ponerse de rodillas para así poder ponerse de pié, aunque si no hubiese sido por la intervención de un par de robots Noire, Akko hubiese caído de inmediato al suelo una vez más.

Aquellos robots Noire no sólo habían llegado a socorrer a su creadora sino que también llevaban consigo el “último” artefacto que llevo Red Eye a la batalla el cual era aquel brazo prostético no mágico.

- Eggh, ¿Por que no me dejaste crear un segundo brazo Noire?

- Ese tipo de brazos prostéticos tardan demasiado en ser creados. ¿Cuanto tiempo más nos hubiese tomado crear un segundo brazo Noire a uno completamente normal?

- ... Bien, tu ganas. Sólo espero no arrepentirme de no hacer una segunda prótesis mágica.

Tras decir esto, uno de los robots Noire abrió el estuche donde venia resguardado aquel brazo prostético no mágico para sacarlo y ajustarlo al muñón del destruido brazo derecho de su creadora.

Y así, una vez más con un brazo prostético puesto, Akko comenzó a caminar lentamente hacia las escaleras de la torre con las no tan buenas intenciones de acabar con el lugar que tanto amo y le falló cruelmente...

Una vez pudo llegar a la cima, Akko respirando muy pesadamente, con una visión sumamente borrosa, una terrible jaqueca, tres costillas fracturadas y aquella punta de flecha aún clavada en su hombro, se dirigió hacia una de las esquinas de la plataforma para comenzar a sacar de múltiples bolsillos en su vestimenta todos los ingredientes para crear su brebaje alquímico e introducirlos dentro de una especie de termo hecho enteramente de material Noire.

Mientras aquel brebaje se preparaba dentro del termo, Akko se acerco al borde de la torre para poner sus manos detrás de ella a la altura de su sintura y observar con algo de dificultad todo el panorama caótico causado por ella mientras sólo el sonido del viento y de la piedra filosofal estaban presentes allí o por lo menos así fue hasta que a estos dos sonidos se le sumo uno de poderosos aleteos constantes seguido de alguien aterrizando en el otro borde del lugar. Para Akko era obvio quien era.

A- ¿Lo recuerdas...? (Mirada nostálgica) Hace once años aquí mismo fue donde nuestra parte de defender Luna Nova del misil llego a su fin, donde perdí mi brazo por ti... Y ahora mi misión es acabar con Luna Nova portando un nuevo brazo... Aquí hace once años estabas verdaderamente preocupada por mi... Y ahora estas preocupada por mis acciones, por lo que le podría hacer a la maldita academia que me lastimó y traiciono junto a las demás chicas en las que alguna vez confíe mi amistad... ¡Que giros tan extraños suele dar la vida! ¿O no, Diana Cavendish...?