Capítulo 028.

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—Avancen— susurró Sandler haciéndole señas a los cinco hombres que estaban con él.

Comenzaron a avanzar en dirección a la puerta en silenció, a los segundos uno de ellos abrió la puerta con una fuerte patada, cosas rompiéndose se escucharon dentro de la casa seguido de disparos. Luego nada.
—Ya pueden entrar— Sandler llegó a nosotros dirigiéndose especialmente a Dominick.

Él asintió y avanzó con Ann a su lado hacia la puerta, Sandler conmigo los seguíamos detrás juntó con dos hombres más.
Uno de los cinco hombres nos esperaba en la puerta. La casa era un desastre, cosas rotas bajó nuestros pies, muebles volcados, uno que otro cuerpo en el suelo. Todo estaba a oscuras a excepción una de las salas donde un hombre, moreno y rapado estaba atado a una silla con otros dos hombres a su lado cuidándolo.

Dominick se posicionó al frente de esté, agachandose para quedar a su altura. Ann se escabulló quedando a mi lado. Sandler se movió cerca de Dominick susurrándole algo al oído.

—Dorman, te advertí de lo que sucedería — habló Dominick —Aún así no me escuchaste— susurró tomando del cabello al hombre que aún no mostraba su rostro, Dominick aumentó el agarré levantando la cabeza del hombre, hasta que se le viera el rostro —¿Quién te pagó?— preguntó.

—Nadie— susurró el hombre que con suerte podía respirar.

—¡Eso es mentirá!!— gritó Dominick, se levantó rápidamente dando una pequeña vuelta en su lugar.  —Responde a mi pregunta ¿Para quién trabajas?, tienes tres segundos, uno.

Todos estábamos expectantes, esperando la respuesta del hombre.

—Dos— siguió con la cuenta Dominick, parado al frente de él, observándolo — Tres— subió la mirada a los hombres a sus costados —Matenlo— dijo dando media vuelta, ambos hombres asintieron sacando sus armas.

—Ellos ya viene— susurró el hombre, Dominick se paró en secó, volviendo su mirada a el y levantando la mano a ambos hombres a su costado.

—¿Quienes vienen?— preguntó.

—La policía ya sabe que están acá— unos pasos rápidos interrumpieron en la sala.

—¡Tenemos que irnos! ¡Se escucha las sirenas de la policía!— dijo él hombre que se había quedado en la puerta.

Todos esperábamos la orden de Dominick, las sirenas se escuchaban cada vez más cerca.

—Lo lamentó Dormán— Sonó un disparó, el cuerpo de Dormán cayó muerto. Sandler había disparado —¡Hora de ir nos!, ¡Annet, Josh, Roon los quiero conmigo! Sandler guía al restó. Muevanse

—¡Ya escucharon! ¡Al y compañía conmigo!— Sandler salió juntó con los demás al frente de la casa donde ya estaban los autos.

—Roon guía— habló Dominick, Roon asintió caminando rápido, todos lo seguíamos detrás. Caminábamos por un pasillo angosto todo pintado de rojo. Atrás nuestro ya se escuchaban los disparos.

—¡Alto! ¡Policía!— un gritó atrás nuestro se escuchó seguido de unos balazos y pisadas. Las balas nos rozaban.

—Corran— gritó Roon. Nos movíamos lo más rápido que podíamos pero el pasillo era estrechó.

Para nuestra suerte una puerta apareció en nuestro caminó.

—Hay que trabar la puerta— comenté al cerrar está, se escuchaban las pisadas al otro lado, seguido de unas patadas.

—Esto funcionara— Roon apareció con una tabla de metal. El umbral de la puerta era lo suficientemente anchó para poner la tabla de forma horizontal —Listó, eso nos dará una leve ventaja. Tenemos que movernos.

Corrimos por unas calles desiertas, la policía nos pisaba los tobillos.

— Separarnos— dijo Roon cuando páramos para poder respirar, Dominick me miró.

—Josh, ve con Annet— dijo mirándome —Sigan corriendo, hasta la fábrica— miró a Ann.

—¡Hay que ir nos!. Dominick!.

—Cuidala— me miró y besó la frente de Ann antes de salir corriendo tras Roon.

—Vamos— dije entrelazando nuestra manos.

De la nada apareció un policía, nos quedamos quietos. El policía con la arma en alto apuntando hacia nosotros.

—Josh... — susurró el policía, lo reconocí. Dylan el segundo al mandó luego de mi padre, la sangre se me enfrió. Un disparó se escuchó, miré a Ann a mi lado ella sostenía un arma, Dylan estaba en el suelo. Muerto.

—Corre— gritó Ann soltándose de mi agarré, miré el cuerpo de Dylan para resignarme y correr tras Ann hasta alcanzarla.

—¡¿Donde quedá la fábrica?!— pregunté aún corriendo.

—¡Ya estamos cerca!— la bocina de un auto a nuestro lado nos sobresalto.

—¡Suban!— gritó Roon por la ventana, él auto se paró más adelanté, ya se veían los autos patrulla unos metros más atrás.

Ambos corrimos hacia el auto, cuando Ann de la nada cayó desplomada en el pisó.

—¡Annet!!— corrí hacia ella, su cuerpo inconsciente tirado en el pisó, con dos manchas de sangre en su blusa. La tomé entré mis brazos corriendo hacia el auto, podía sentir como débilmente respiraba. Abrí la puerta trasera, metiendo a Ann en el auto. Los auto patrulla ya nos alcanzaba, si no se iban, nos atraparían.

—¡Vayanse!— grité, cerrando la puerta y echandome a correr hacia la fábrica, vi como por la calle el auto de Dominick se perdía de mi vista.

En fin, bienvenidas las nuevas lectoras y saludos a las no tan nuevas

Las quiere;

Feer.

Drag Me to Darkness [Josh Hutcherson]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora