too far, too close. ⟨ joerry, sk8 ⟩

Capítulo nueve, una victoria para todos.

Como si no hubiera bastado con la impresionante carrera de Reki y Adam, la tan esperada carrera de los dos peliazules más talentosos de S dejó a todos extasiados.

La carrera era indescriptible. Todos temieron por la vida de Langa, creyeron que Adam ganaría y qué ocurriría un accidente como el primero en esa pista tan riesgosa que no había visto en años. Por suerte ocurrió lo mejor, ganó quien debía ganar y no salió nadie herido.

En esa ocasión no podían pasar por alto la ocasión, iban a festejar, aunque sería en unos días para juntarlo con el cumpleaños del ganador, por eso empezaría a organizar todo para hacer un banquete especial.

Luego de que Langa fuera halagado por muchas personas decidieron irse, todos ellos en auto con Cherry como conductor, él en su moto. Esperó a que el vehículo arrancara primero y estuvo por arrancar, hasta que algo lo detuvo.

La limusina de Adam llegó a su lado. Las ventanas oscuras no dejaban ver nada, pero no hubo más dudas cuando la bajó y dejó ver a Adam. Estaba lastimado con raspones y su cabello era un desastre, aun así, su expresión era la más calmada que le había logrado ver desde que dejaron de ser amigos. Era bueno verlo así, aunque hubiera tenido que perder en el proceso.

—Adam.—saludó, bastante tajante al recordar lo que le había hecho pasar a Cherry.

—Joe.—el peliazul no bajó de su limusina, pero estaba tan cerca como para darle al menos una patada. Podía intentarlo—Luego de lo que pasó hoy... bueno, Langa me ha dado mucho que pensar.

—Eso era lo que querías, supongo.

—No. Pero tal vez fue lo mejor, me hizo entender unas cuantas cosas y por eso... quiero disculparme contigo y con Cherry.

No quería ser un novio posesivo, pero la idea de ver al pelirosado cerca de él no le gustaba nada. Ya sabía que nunca hubo amor entre esos dos, pero no podía quitárselo de la cabeza tan fácilmente.

Aun así, estaba seguro de que Cherry lo apreciaría demasiado, sería bueno para él.

—¿Y? ¿Esperas que le dé el mensaje?—se apoyó en la moto, mirándolo con seriedad—Es él con quien debes disculparte, no conmigo.

—Tienes razón. Lo haré cuando pueda.—pareció que había terminado, pero antes de irse le sonrió un poco, una sonrisa tan agotada como divertida—También debo disculparme contigo, aun así, creo que fuiste el más afectado cuando salió lastimado.

Ahí estaba otra vez, lo había notado. Adam sabía algo.

—Es mi mejor amigo, claro que me preocupé.—trató de hacerse el desentendido, pero la mirada sagaz del peliazul le confirmó que no había modo de disimular.

—Claro. Espero que puedan dejar de discutir todo el tiempo para dar el siguiente paso, si no lo han dado ya... si me disculpa y podemos recuperar la amistad que teníamos, aunque sea con mucho tiempo, sólo quiero pedirte una cosa: no discutan cómo lo hacían en frente mío todo el tiempo, la tensión sexual es demasiada como para ignorarla.

La limusina se perdió antes de que pudiera reclamarle, pero al final tenía razón, en parte. Al menos algo bueno salió de la conversación, y aunque le hubiera guardado algo de rencor luego de todo lo que le hizo a Cherry... también creía poder perdonarlo si el pelirosado lo hacía primero. La idea de volver a los viejos tiempos era muy agradable, estaba dispuesto a darle una segunda oportunidad.

El día esperado fue atareado desde la mañana. Kaoru se quedó a dormir, así que perdió mucho tiempo acariciando su cabello hasta que despertó y le trató de pervertido. Eso los llevó a una discusión que los llevó a algo más.