Jenna

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(Josh)

Después que me he enterado lo de Jenna, decidí ayudarla por el simple hecho de que me conviene conseguir lo que le he pedido a cambio.

Hoy después de clases, iré a la clínica de Roy, otro "amigo de la familia..." con la diferencia que este aparenta ganar todo ese dinero con esa clínica. Y nadie lo sospecha, hasta podría meterse a político si él lo desea.

-Recuerden que como estamos suspendidos del equipo, no jugaremos los dos primeros juegos. -Soltó Andrew cabreado dejando mis pensamientos a un lado. -Por lo menos... Matt lo va a hacer bien, estoy seguro de eso.

Imbécil.

¿Tenían que mencionarlo?

Nathan parece leer mis pensamientos al ver mi cara y hace una señal con sus manos de "autodefensa". No pude evitar sonreír ante su idiotez y Andrew se acomoda en el asiento cuando nos dimos cuenta que el profesor ya había llegado.

-Ustedes dos -Señala el profesor a ambos mientras se acerca - No son de esta clase, fuera.

-¡Sí! Fuera. -Dije antes de soltar una carcajada.

-Cooper, usted también. -Me interrumpe el profesor con su cara inexpresiva y me enseña con su mano la salida del aula. - ¡Cooper!

Choque mis manos en mis pantalones ruidosamente fastidiado, ya es la segunda vez en este año (y en todos) que me sacan de la clase. El profesor espera con una ceja levantada, aún con el brazo señalando la salida.

-¿Qué? También te corrieron -Se escuchan las burlas al salir del aula. Nathan sigue- ¿Qué paso con tu posición académica Cooper?

-Déjame en paz perro. -Dije ignorando sus risitas, acelere el paso para dejarlos allí sin que protesten -Me tengo que ir.

Pase por mi casillero para dejar lo que llevaba, salí del instituto ya que esa era la última clase. Mi objetivo ahora es llevar a cabo el plan de Jenna.

Camine por el estacionamiento buscando las llaves en mi bolsillo, al conseguirlo le quite la alarma y me adentre en él dispuesto a manejar.

-¡Espera! -Se oye el grito de Jenna en medio del solitario estacionamiento. Espere desde mi auto, ella corrió y se recostó sobre la ventana del copiloto. -Debo ir contigo, tengo que asegurarme que me vas a ayudar y también tengo que hablarte de una ultima cosa.

-No puedes venir, de ninguna manera.

-Ya es tarde. -Responde entrando al auto y colocándose el cinturón de seguridad.

Apreté mi mandíbula puesto que odio que me lleve la contraria. De verdad me molesta. Sin decir una palabra más empecé a andar.

-Vamos... Josh necesito que me digas algo. -Dice ella para quebrar el silencio que desde hace minutos en el camino ninguno de los dos lo había hecho.

Aun molesto porque ella viene conmigo suelto un suspiro arrogante, ella asiente.

-Dime ¿Quién es? -Solté mas frio de lo usual, abrió los ojos como plato y mordió su labio nerviosa. -Prometo no romperle la cara por aprovecharse de que estabas ebria o drogarte para aprovecharse y decir que estabas muy ebria.

-Josh... -Desvié la vista para concentrarme al volante, me pare en el semáforo y la observo esperando que continúe. - Es normal que una chica de dieciocho años tenga relaciones sexuales en una fiesta.

-Eso no eres tu -Bufé molesto - Y está bien si no me quieres decir pero no me digas cosas que ni tu misma te puedes creer.

Otra vez el silencio incómodo.

-¡MUEVETE IDIOTA! -Escucho los gritos y las bocinas atormentantes de atrás.

Arranco a toda velocidad antes de que el semáforo marcara rojo, dejando que los insultos de atrás se alejen.

-Ya vamos a llegar -dije antes de entrar al estacionamiento de la clínica. -No te vas a bajar del auto, solo espérame ya que fue mala idea que vinieras conmigo.

-Está bien. -Tartamudea y sin siquiera verla bajo del auto.

Subí al último piso. Donde se encuentra la oficina del director médico de ese lugar. Generalmente, el dueño esta por esos lares.

-¿Josh? -Volteo para ver de dónde proviene la voz de Roy - O ¿Matt?

Porque... ¡¿Nos siguen confundiendo?!

Estúpido gemelo.

-Josh -Finjo una sonrisa ante su confusión. -Vine a pedirte un favor.

-¿Qué? No te veo desde que tenias creo que 15 años y ni puedo reconocer si eres Josh o Matt pero quieres que acepte ser tu cómplice en cual sea el motivo por el que viniste.- Por dios, tiene razón. -Porque te aseguro que debió ser algo MUY serio para que vengas a pedir ayuda.

Mierda.

Yo a Roy no lo veo desde que el imbécil se fue a Londres, no tiene mucho sentido que después de tantos años le pida un favor a quien ni siquiera le tenía confianza. Solía decirle a mi madre que este tipo me daba mala espina.

-Por favor - Logro decir después de unos segundos - Vamos, por Carlos Cooper.

-Primero dime de qué trata. -Dice no muy convencido y me enseña el camino hacia donde supongo que es una oficina.

Al llegar a la oficina, que para mí, está muy descuidada para ser del dueño de la clínica y uno de los grandes millonarios que habitan esta ciudad. Él se sienta en el escritorio y en el asiento del frente.

-Y bien... -Entrelaza sus manos y fija su mirada en mi. Busco la manera de empezar y este interrumpe. -Antes que nada, lamento lo de tu padre.

Y tenía que decir eso, él tenía que arruinarlo.

Me eche hacia atrás y coloque mi mano en mi cuello. No podía decir nada e hice un gran esfuerzo para sonreírle, el también sonrió y me acomode de nuevo en mi asiento para hablar.

-Resulta... -No sé cómo decirlo de la mejor manera - Tengo una chica que se la follaron por primera vez en una fiesta.

Mejor manera imposible.

-Quieres decir que perdió su virginidad en una fiesta.- Dice burlon ante mis palabras, fastidiado confirmo y este suelta una pequeña risa. - Y supongo que quieres que te ayude a ver si la embarazaste.

-No, no fui yo y no está embarazada. -Hasta donde yo se. - El problema es que sus padres son muy locos en ese asunto y ella no quiere que se enteren cuando venga a consultarse.

-¿Los padres la traen solo para asegurarse que sigue virgen?

- Te dije que están locos. - Asiente y vuelve a burlarse. -Necesito que alteres los resultados para que no la maten.

-Ok, ok, ok. Solo porque me causa gracia el asunto. Lo hare, dame los datos de ella y todo eso para dejar a la doctora encargada y que de ese diagnostico no proteste.

-Gracias.

Me da una hoja en blanco y un bolígrafo. Escribo los datos de Jenna: Nombre completo, dirección, nombre de sus padres y todo eso. Saco mi billetera de uno de mis bolsillos y en ella una foto de Jenna para que Roy sepa como es y no se confunda.

-¿Por qué tienes una foto de ella en tu billetera?

-Lo traje con el propósito de dártela. -Mentí. -En serio gracias.

-Adiós Cooper.

Salí de allí por el estacionamiento, listo para regresar con Jenna. Abrí la puerta del piloto y entre sin darme la libertad de ver si ella esta allí o no.

Y no está. Jenna no estaba en el auto.

Baje del auto y busco con la mirada algún rastro de ella en aquel estacionamiento. Entro de nuevo al auto en busca de mi teléfono y marco su número.

-¿Bueno?

-¿Donde estas? Te dije que me esperaras en el auto

-Oh, sí bueno, fui por uno refrescos a la cafetería de esta clínica voy en un momento.

-Rápido.


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⏰ Última actualización: Aug 13, 2015 ⏰

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