Capítulo 9

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Llegaron al edificio de la rubia, Carina aún seguía en la espalda de Maya e  intentaba coger las llaves, pero con la morena encima de ella, no podía mucho.

M: Carina, ¿me puedes hacer un favor?- girando la cabeza para poder verla-

C: Si, dime - con una sonrisa en su cara-

M: En el bolsillo de la parte de atrás de mi pantalón están las llaves - con un deje de nerviosismo y timidez- Las puedes coger tú.

C: Emmm... - confusa- Sí.

La morena se agacho un poco de medio lado, metió la mano , sacó las llaves rápidamente y se las dio a la rubia. Maya al ver la reacción de Carina , se volvió a girar mirando hacia la puerta, con una sonrisa de medio lado.

M: ¡Oye! - abriendo la puerta y metiéndose - ¿No muerdo, eh? - mirando a la morena con una sonrisa traviesa y levantando su peculiar ceja-

Carina se agarró más fuerte a Maya y le dio un pequeño mordisco en el cuello.

C: Tu no, pero yo sí - riéndose-

La rubia se quedó parada y mordiéndose el labio. Tomaron el ascensor hasta la última planta, salieron y entraron a la casa de la Maya.

Maya se quedó mirando hacia el sofá, miró hacia la morena de medio lado y nuevamente al sofá.

Empezó a correr hacia él riéndose. En un movimiento rápido, tiró a Carina en él y se puso encima de ella. La morena se empezó a retorcer mirando fijamente a la rubia. Maya se fue levantando poco a poco, sin quitarse de encima de Carina. Después tomó sus manos, lentamente, sin quitar la vista de los ojos y de los labios de esta, y las fue colocando encima de la cabeza de la morena. Las sujeto con una mano mientras que con la otra fue acariciando su brazo, bajando hacia el hombro, subiendo por el cuello.

M: Yo no muerdo- con una voz sensual - tu sí que muerdes- acariciando con las yemas de los dedos por la piel suave del cuello de la morena.

Carina, pasó su lengua por el labio inferior, luego se lo mordió, tragó saliva con dificultad y suspiró.

M: ¿Pero sabes lo que hago yo? - acercando su boca a los labios de Carina. La morena sin apartar la vista de la rubia negó con su cabeza - Pues yo… - acercándose más- hago…- a unos milímetros de del oído de la morena- cosquillas - susurrando-

La morena abrió los ojos de golpe, Maya se levantó y empezó a hacerle cosquillas por todo el cuerpo de Carina . La morena intentaba desviar los brazos de la rubia, escurriéndose del cuerpo de ésta.

Con un movimiento de cadera quedó por encima de Maya y empezó hacerle cosquillas. La rubia para defenderse, agarró un cojín y empezó a darle con él. Carina se lo quitó y lo tiró a un lado del salón. Se levantó quedando sentada en la cadera de esta, puso sus manos en los hombros de Maya haciendo presión para que no se moviera.

C: Vamos- mientras seguía haciendo presión - Defiéndete ahora sin necesidad de cojines - con una sonrisa traviesa en su cara- Cobarde, gallina capitán de la sardina- le dijo pausadamente y provocando a la rubia-

M: ¿Con que esas queremos, no? - subiendo la ceja lentamente mientras la morena asentía-

Maya  tomó a Carina de la cintura, dio un brusco movimiento y acabaron en el suelo. Las piernas de la rubia habían quedado en el medio de las piernas de la morena. Los ojos de Carina fueron a parar a los labios de la rubia.

Maya se fue acercando poco a poco hasta rozar sus labios con los cálidos de la  morena, humedeció sus labios y la besó. Un beso dulce, suave que empezó a ser apasionadas y calientes, sus lenguas jugaban, se rozaban, se buscaban, luchaban por tener el control.

The Cocktail Of LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora