Lookism x tn ✓

Vasco - Historia 4

Miré la delgada figura de Eun-Tae, pero con el espíritu de un luchador.

"No dejaré que lastimes a mis amigos más", dijo, mostrando su cuerpo lleno de cicatrices. Las lágrimas brotaron de mis ojos. Vi que lo golpeaban aún más. No pude soportarlo.

Pero cuando abrí la boca, toda la habitación se puso a oscuras.

Me desperté con un sudor frío. Respirando pesadamente, miré la hora. Mierda. Solo quedaban diez minutos para prepararse e irse.

Escuché susurros a mi alrededor.

Por supuesto, había aprendido a lidiar con estos comentarios desde que me mudé a Corea. Me encogí de hombros y miré mi agenda. Al acercarme a un estudiante, le pregunté dónde estaba el Departamento de Arquitectura.

"Disculpe, ¿sabe dónde puedo encontrar el Departamento de Arquitectura?" Dije, tocando a un hombre en el hombro. Llevaba un traje de pandilla, con BNC en la espalda.

"Oh, sí. En realidad, me dirijo allí ahora mismo, ¿quieres venir?" dijo, abriendo el camino. Sonreí.

"Gracias."

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"Hola, soy la nueva estudiante transferida, Tn. Vine aquí desde los estados", me presenté, inclinándome levemente. Miré el mar de gente. Todos los machos. Genial. Me senté en silencio, sin notar las dos caras conocidas entre la multitud.

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Me senté en una mesa, comiendo tranquilamente mi almuerzo cuando sentí una mano golpeando mi espalda. Miré hacia atrás, frente a un par de gafas de sol.

"Dame tu número, niña." Suspiré y me levanté, cepillándome la ropa y luego mirándolo. Levanté la mano y luego lo abofeteé.

"No", respondí, luego me senté de nuevo. Gruñó y tiró de mi cabello. Cheezus.

"Voy a tener que forzarte a salir, entonces." Puse los ojos en blanco, sostuve su muñeca en mi mano y la apreté. Se quedó paralizado, gritando de dolor, atrayendo la atención de toda la cafetería.

"Cuando una dama dice que no, quiere decir que no". Ahora presioné mi pie sobre su hombro, haciéndolo caer de rodillas.

"Cuando una dama es abusada, ella se defiende". Golpeé con mi pie su hombro, el chico ahora estaba acostado en el piso con dolor.

"¡Caramba, es una bestia!"

"¿Cómo aprendió a vencer a Vin Jin?"

"Hoo ~ Ella está bien." Gemí de molestia y tiré el resto de las sobras a la basura, luego salí.

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Caminando bajo un gran roble, tarareé para mí.

"Hombre Héroe, Defensor de la Justicia ..." Canté en voz baja, mirando a mis pies. Vi a algunos chicos de mi clase acercarse a mí. Había un gángster grande y masculino, con tatuajes por todo el cuerpo, guiándolos. Me burlé y me mantuve firme, mirándolo.

Lo único que no le intimidaba era el hecho de que tenía una expresión realmente nerviosa en su rostro. Algo así como ... Eun-Tae. Negué con la cabeza, borrando el pensamiento. Él se fue de mi vida, desde que me mudé a los Estados Unidos, y regrese aquí. Me miró a los ojos.

"Si estás aquí para pedir mi número, lárgate. No necesito que nadie más se compadezca de mí", gruñí, mirándolo.

"¡Cómo te atreves a hablarle así a Vasco!" replicó uno de los miembros de la tripulación, moviendo un puño en mi dirección. El líder lo detuvo.

"No golpeamos a las chicas", dijo con calma. Puse los ojos en blanco.

"¿En serio? ¿Tus padres te pusieron el nombre de 'Hombre Héroe'?", Dije, cruzando los brazos. Vasco, o como se llame, negó con la cabeza.

"Tn ..."

"Sí, ese es mi nombre."

"¿Te acuerdas de Jace Park y Eun-Tae Lee?" preguntó, mirándome. Descrucé los brazos y lo miré con sospecha.

"...¿Sí?" Respondí, indicándole que continuara. Por dentro me estaba volviendo loca.

"Bueno, gusto en volver a verte, Tn". Vi como otro miembro de la tripulación avanzaba. Jadeé, reconociendo esas grandes orejas casi de inmediato.

"J-Jace ..." tartamudeé, con lágrimas en los ojos. Él sonrió.

"Hola Tn, mucho tiempo sin verte". Me reí y me apresuré a abrazarlo. Los demás nos miraron por un segundo. Sonreí de nuevo mientras me separaba. Señalé a Vasco.

"¿Quién es él, Jace?" Pregunté, frunciendo el ceño.

"Mira de cerca y compruébelo usted mismo". Entrecerré los ojos y miré su pecho. Tenía marcas débiles en el pecho. Empecé a sonreír, mientras lágrimas de felicidad corrían libremente por mis mejillas.

"Maldita sea, Eun-Tae ..." susurré, abrazando a Vasco, "No pensé que nos volveríamos a ver". Vasco me dio una pequeña sonrisa y me devolvió el abrazo.

"Sí." Me solté y miré a mis dos amigos.

"Es bueno estar de vuelta."

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Me reí y hablé con los otros miembros de Burn Knuckles, una de sus chaquetas adornaba con orgullo mi espalda.

"Oye Tn Vasco quiere hablar contigo un segundo", señaló Jace, "Sola". Asentí y di un paso hacia adelante, un poco confundida. Vi a Vasco cerca de la esquina, nervioso. Como el primer día que nos conocimos.

"¿Cómo podría decirte que no, Vasco?" Me reí, besando sus labios. Me aparté y le sonreí. Él me devolvió una sonrisa feliz.