Coincidencias del destino 2 (LISOO)

Capítulo 5 Jennie

Dos años y siete meses atrás

¡Ves! ¡Te dije que eres más idiota e inútil que tú madre! Nunca me sirvió de nada, ni para darme una hija ejemplar, eres una basura Jennie no mereces tener el apellido Kim, fíjate que me aseguraré de que no lo pongan en tu tumba, porque te queda grande, dame las gracias, porque vas a estar con la puta de tu madre, esa idiota que solo fue un estorbo en mi vida, una piedra en el zapato, nada a comparación de muchas mujeres con las que he estado, ella fue la peor, pésima en todo momento, en la cama, como mujer, como madre ni para parir sirvió, pero bueno le das un saludo de mi parte a esa puta... No mejor antes mataré a la maldita de Manoban así las dos me saludan a tu madre... -escuche como mi padre decía con bastante rabia-

Y fue entonces que descargue la pistola en todo su cuerpo, y al caer como si fuese su último respiró le disparó a lisa, está como estaba de lado lo recibió en la parte baja de la nuca, yo quería correr para ayudarla pero me estaba desangrando y no tenía nada de fuerzas, lo único que alcance a escuchar a lo lejos fue la voz de mi hija.

¡Mami...! ¡Mami despierta no te mueras...! ¡Mamita tú no...! ¡No me dejes...! ¡No te vayas con mis abuelos! ¡Aún no mami...! ¡Aún no...! ¡Mami Jisoo dile que no se vaya...! -no sé si me lo decía a mí o a lisa-

A lo lejos se escuchaban las patrullas,  pues antes de hacer mi salida triunfal les llamé por cualquier cosa y así que estuvo bien porque sino íbamos a morir desangradas lisa y yo, sin imaginarmelo las patrullas de policías y ambulancias se acercaban, yo ya no tenía fuerzas para mantener mis ojos abiertos, y me dejé vencer.

Desperté a los cinco días después de lo que sucedió con nuestro altercado con mi padre, no saben cuánto lo odio, yo misma voy a matarlo si es que el muy desgraciado sobrevivió.

Todo en mi vida había cambiado necesitaba saber de lisa, así que me levanté pero en eso entró mi médico.

Srta Kim, ¿Qué hace? -preguntó al verme de pie-

¡Poniéndome de pie, voy a ver a lisa! ¿que no se da cuenta? -contesté molesta-

¡Srta Kim, usted no puede andar para allá y para acá, debe guardar reposo aún, ahorita le hablaré a su hermana, es su deber darle la noticia sobre lo que sucedió con su cuñada lisa! -cuando escuché eso sentí que el aire se me salió por completo de mis pulmones, el médico me hizo recostarme de nuevo y fue por Jisoo-

A los cinco minutos alguien tocó la puerta.

¡Pasa! Dije -jisoo asomó su cabeza y me sonrió-

¡Hola nini! Al fin despertaste pequeña, ¿Cómo te sientes?

¡Me siento muy bien Jisoo! ¿Puedo ir a ver a lisa?

Oh sí el médico, me dijo que quieres ir a ver a mi Lili, pero siento decirte que ella, ella no resistió las ambulancias llegaron tarde y ella...

¡No es verdad! No me digas que ella murió Jisoo, no puede ser cierto

¡Nini! ¡Nini no...! ¡Ella no murió al menos no por completo, ella está en estado de coma, la bala le dió en su nuca y como tardaron algo de tiempo en llegar las ambulancias, ella había perdido mucha sangre y dañó tejido importante en su cerebro, y cuando llegó aquí al hospital ya había caído en ese estado!

¡No puede ser posible, no! ¡Yo debí haber llegado antes Jisoo, si yo hubiera llegado antes, ella estaría aquí contigo y con nuestras hijas! ¡Perdóname Jisoo! ¡Perdóname por no haberlas podido salvar a las cuatro!

¡Tranquila pequeña nini, no fue culpa tuya, fue culpa de él! ¡De nuestro maldito padre! -decía Jisoo con bastante odio en sus palabras-