•𝑫𝒆𝒔𝒕𝒊𝒏𝒂𝒅𝒐𝒔 𝒂 𝒂𝒎𝒂𝒓𝒔𝒆• «dramione»

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Los días habían pasado rápidamente y sin ningún inconveniente. Los chicos todos los días entrenaban tal y como habían acordado, por el momento solo era entrenamiento físico, después vendría lo demás. Las chicas no sospechaban nada en el día todas estaban dormidas y en las noches algunas ya se encontraban en su habitación, pero cuando se quedaban más tiempo en la sala común los chicos decían que era para estar en forma para los entrenamientos de Quidditch.

El encargado de vigilar a Hermione era Draco, y los demás vigilaban a las chicas a distancia.

Era jueves, Hermione y Draco se encontraban en el aula en el que les daban asesorías a Katie y Alex esperándolos, llevaban 15 minutos de retraso.

─ ¿Crees que les pasó algo? ─ Decía muy nerviosa la castaña.

─No lo creo, quizá se entretuvieron con algo─ Dijo Draco mientras jugaba con su varita.

─ ¿Cómo puedes estar tan tranquilo? ─ Dijo quitándole su varita.

─ ¡Hey! Dame mi varita─ Dijo Draco intentando quitársela.

─No hasta que ellos lleguen─ Decía mientras caminaba de un lado a otro

─ ¿Y mi varita que culpa tiene sabelotodo? ─ Decía mientras la seguía.

─Idiota─ Dijo mientras le aventaba su varita

─ ¿Por qué el insulto? Ya relájate─ Dijo el rubio mientras rodaba los ojos.

La castaña iba a replicar, pero la voz de la directora los interrumpió.

─Lamento interrumpir su discusión, Srta. Granger, Sr. Malfoy, pero es necesario que me acompañen ─Dijo mientras caminaba ellos solo la siguieron.

─ ¿Sucede algo directora? ─ Preguntó preocupada Hermione.

─Es sobre Katie y Alex, se han metido en problemas y creo que los indicados para ayudarme con su castigo son ustedes.

─Puedo preguntar ¿qué fue lo que hicieron exactamente? ─ Dijo el rubio mientras se detenían delante de un aula.

─En mi clase, estaban dando el repaso de el hechizo que ustedes ya les habían enseñado con anterioridad, me sorprendí ya que ambos lo hicieron a la perfección pero una compañera de ellos llamada Samantha empezó a insultar a Katie, diciendo que era una tramposa y que el único que hacia el hechizo a la perfección era ella─ Hermione solo frunció el ceño─ Yo le dije que guardara silencio y así lo hizo pero Alex lanzó el hechizo contra Samantha diciéndole que se callara, y Samantha se lo devolvió haciendo que las aves volaran directamente a la cara de Alex y ahí es donde entra Katie que por defender a Alex le lanzó las aves a ella y aparte la amenazó.─ Dijo la directora mientras negaba con la cabeza y suspiraba. Esos niños le iban a sacar canas verdes.

La castaña y el rubio se miraron sorprendidos y sonrieron.

─ ¿Y quiere que nosotros les pongamos un castigo?

─Así es y que hablen con ellos acerca de su conducta ya les bajé puntos a su casa, de Samantha me encargare yo ya que ella fue la que comenzó todo─ Dijo la directora mientras se sobaba la cabeza. ─ Cuento con ustedes para que hagan lo que tengan que hacer para que esa conducta no vuelva a presentarse en mi clase ni en ningún otra.

─Cuente con ello directora le haremos saber del castigo que les vamos a poner─ Dijo Hermione.

─Gracias, están adentro─ Y sin más que decir los dejó solos.

Hermione y Draco solo se miraron y se soltaron riendo.

─Es que no puedo creerlo, pobre directora, tener que ser directora y maestra al mismo tiempo ─Dijo Hermione mientras abría la puerta.