En menos tiempo de lo que creyó ya se encontraba en una gran tienda, todo gracias al gerente del hotel.
-Hola, usted debe ser Jimin -una Omega lo asustó cuando se encontraba viendo todo a su alrededor -me llamo Hye.
-Hola -respondió suavemente.
-¿Qué planea hacer estos días? -comenzó a caminar junto a ella.
-Bueno, tendremos una cena, creo -no sabía muy bien lo que Yoongi planeaba para esos días.
-Entonces necesita algo formal, venga encontraremos algo que le guste.
Fue siguiendo a la empleada por toda la tienda, ella le daba consejos y una agradable conversación.
-¿Eres talla chica, no?
-Si, ¿Cómo lo supiste?
-Es mi trabajo -su sonrisa era muy bonita.
Ella realmente le agrado y olía bien.
-Sabes Hye, él en realidad no es mi tío -dijo con pena.
-Nunca lo son -respondió divertida -yo también quisiera un tío así.
Ambos soltaron un par de risas para continuar con su labor de buscarle unos lindos atuendos a Jimin.
Si, Chanel se convertiría en su tienda favorita.
Tan pronto como llegó al hotel corrió a darle las gracias al alto hombre, sin su ayuda definitivamente no hubiera podido conseguir algo decente para la cena con Yoongi.
Él también era alguien agradable.
En cuanto cerró la puerta del penthouse el teléfono dentro de la habitación comenzó a timbrar, corrió para alcanzar a contestar.
-¿Diga?
-Jamás debes contestar el teléfono -identificó la voz del Alfa a través de la línea.
-¿Para qué me estas llamando?
-¿Compraste ropa?
-Compré un traje, uno muy elegante.
-Muy bien, estaré en el lobby del hotel a las ocho en punto.
-¿No vas a venir por mi -de pronto la voz del Omega se volvió mas suave.
-Es un negocio no un romance.
Alguien tenía que poner los pies en la tierra y recordar el trato que tenían.
-¿A dónde vas a llevarme?
-A un restaurant francés, es muy elegante.
-Ah si, bueno, nos vemos en el lobby pero solo porque estás pagándome.
-Muchas gracias.
Ambos finalizaron la llamada con pequeñas sonrisas en sus rostros.
Yoongi rápidamente le indicó a su secretaria que volviera a marcar el número al que anteriormente había llamado.
Otra de las secretarias de la empresa se acercó a él.
-Señor Min, lo buscan para la junta.
-Un momento, dígales que estoy ocupado, algo muy importante.
La mujer mayor ya tenía el número marcando en la línea.
-¿Hola? -de nuevo esa suave voz.
-Dije que no respondieras el teléfono.
-Entonces deja de llamarme -sonaba algo divertido.
Le agradaba que Jimin no fuera un Omega completamente sumiso, tal vez en la cama lo era pero no se dejaba doblegar por los Alfas. Una suave risa se escuchó por el auricular, encontraba divertido a Jimin. Ambos volvieron a colgar con sonrisas aun más grandes en sus rostros.
Al alto hombre vestido de negro casi se le sale el corazón al ser tironeado de entre los grandes pilares del lobby.
-Jinnie -a ese joven Omega se le había dado la gana de llamarlo como quería -tengo un problema.
Oh no, de seguro era una de esas cosas de Omegas, como su celo o algo así, por eso agradecía ser un Beta.
Y no, no fue lo que pensó, el joven Omega solo quería una clase exprés de etiqueta para una cena, no le quedo mas que enseñarle lo que podía en un muy corto tiempo.
Yoongi llegó justo a la hora que le indico a Jimin, se encontraba un poco apresurado, necesitaba que el Omega bajara para llegar a la hora exacta a la importante cena.
-Disculpe señor Min -el alto hombre lo abordo -soy Kim SeokJin, gerente del hotel.
-Ah si.
-Tengo un mensaje para usted de su sobrino.
-¿Mi qué? -Yoongi no entendía nada.
-El joven Omega que esta con usted.
Ahora comprendía todo.
-Ambos sabemos que no es mi sobrino -respondió serio el Alfa.
-Claro.
-Eso lo sé, ya que no tengo hermanos.
-Si señor -respondió SeokJin divertido.
-¿Y el mensaje?
-Que lo espera en el vestíbulo. Es un Omega muy intrigante.
-¿Intrigante?
-Buenas noches, señor.
-Gracias.
Y el Alfa se marchó a donde el Alto hombre le indicó.
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Omega bonito [Yoonmin]
FanfictionMin Yoongi es un importante empresario, viaja constantemente de Daegu a Seúl por trabajo. Park Jimin es un joven Omega prostituto, que termina cruzándose en el camino de Min. El Alfa queda prendado por la inocencia y belleza de su acompañante de la...