Omega bonito [Yoonmin]

Capítulo 11

Se estiró en la gran cama tanteando a un costado sintiendo un vacío a su lado, solo un rastro del aroma a mandarinas de Yoongi quedaba, se giró para enterrar su rostro en la almohada impresa del refrescante aroma. 

Tras ponerse la gran bata acolchonada se encaminó al lugar donde estaba la mesa puesta con el desayuno, Yoongi se encontraba algo distraído comiendo trozos de fresas en un pequeño bowl.

 -Buenos días, ¿en qué piensas ahí solo?

El Alfa levantó la  mirada. 

-En que será nuestra ultima noche juntos y al fin te desharás de mi -llevó unos trocitos más a su boca. 

-La verdad has sido muy difícil de tratar -Jimin se sentó en la silla a su izquierda. 

-Cuando termine todos mis negocios regresaré a Daegu -la pequeña sonrisa que tenía en su rostro se borro, la suave voz hizo que levantara el rostro -quisiera seguir viéndote. 

-¿Enserio? -esa bonita sonrisa del Omega estaba de regreso.

-Si, enserio -Yoongi también le sonrió -ahora tendrás un departamento, un auto e hice arreglos para que puedas ir de compras a cualquier tienda que quieras, todo está arreglado.

La sonrisa de Jimin se fue borrando poco a poco. De pronto todo aquello que el Alfa le ofrecía no parecía tan atractivo como si se lo hubieran ofrecido días antes, tal vez antes de esa semana hubiera dicho que si.

-¿Ah, si? -trató de contener esas terribles ganas de llorar -¿y dejarás billetes en la cama cuando te vayas?

-Jimin, no tiene porque ser así. 

-¿Como va a ser, Yoongi?

-De esa forma no volverías a la calle y tendrías un hogar. 

-Solo es geografía después de todo. 

Jimin se levantó de la mesa para ir a tomar un poco de aire al gran balcón, el Alfa le siguió detrás. 

-Jimin, ¿Qué quieres? -él seguía sin responder -¿Qué quieres que pase entre nosotros?

-No sé -seguía viendo la ciudad -cuando era un pequeño cachorro mi mamá me encerraba en una de las habitaciones para que no hiciera travesuras. Ahí era mi lugar especial yo... yo soñaba que era un príncipe encerrado en la torre mas alta del castillo por una vieja y malvada bruja -el castaño sujetó de mejor manera el nudo de su bata -y de pronto un caballero en su maravilloso caballo negro venia a recatarme y yo lo saludaba, y él escalaba la torre y me rescataba -Jimin caminó un par de pasos para estar frente a Yoongi -pero en mi fantasía el  caballero nunca me decía "cariño, te pondré un departamento".

El molesto sonido del teléfono los interrumpió, como siempre era Kim. 

Yoongi finalizó la llamada para acercarse al Omega.

-Me voy -él se quedó en silencio por unos segundos -quiero decirte que oí lo que me dijiste -él estaba al tanto de lo que sentía -por ahora Jimin, solo puedo hacer eso y es un gran paso para mi. 

Jimin acomodó un poco su corbata. 

-Lo sé. Es una buena oferta para un Omega como yo. 

-Jamás te traté como un prostituto. 

Tras decir aquello el Alfa se marchó. 

-Ya lo hiciste -susurró Jimin. 

Trató de contener las pequeñas lagrimas que resbalaban una tras otra. 

...

Una horas después no espero la llamada del gerente del hotel anunciando que su mejor amigo se se encontraba ahí.