Mi alma está turbada,
no logro encontrar el reposo,
por las muchas emociones que hay en mi,
por las tantas aflicciones,
que parecen estar por venir.Otra vez no sé si estoy haciendo bien,
no sé cómo sentirme al respecto...
Hay tantas opiniones:
"Si yo fuera tú haría esto"
"Si yo fuera ella haría aquello",
es lo que escucho.Pero resulta que nadie es el otro,
cada quien traza su camino,
cada quien vive lo que le toca,
o lo que ha decidido,
cada quien sabe su quién sabe...Es bueno recibir consejos,
pero cuando hay de sobra,
es de sabios saber administrarlos,
es de entendidos dejarse guiar por el espíritu santo para saber cuales tomar y cuáles desechar.Porque aunque hay consejos que vienen con buena intención,
ellos en sí no son buenos.Todo es un balance,
no hay que ignorar todo,
pero tampoco aceptar todo.Y en ese punto me encuentro,
se forma un nudo en mi mente,
entre lo que acepto
y lo que no acepto;
Porque al final todos pueden opinar o pensar,
pero mis decisiones, es a mí a quien van a afectar.Por eso pido la sabiduría de Dios,
para poder Su consejo escuchar,
el que me da a través de personas,
el que me da en su palabra,
el que me da cuando yo misma hablo;
Y en todos ellos el mejor:
El consejo que apacigua mi corazón
y acaricia mi alma dándole esperanza.1 Tesalonicenses 5:21
Sométanlo todo a prueba y retengan lo bueno.💚
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A Corazón abierto
SpiritualSe trata de una serie de escritos que surgen de las conversaciones más sinceras con Papá. Muchos de ellos son de desahogo, pues para mí escribir es una manera de ser libre, de fluir. Han estado guardados en lo más profundo de mi corazón, pero hoy d...