En el pueblo de la decimosexta avanzada, cada dos meses el ejército envía nuevos grupos de soldados junto a suministros para llenar las bodegas de reserva.
Durante ese tiempo, caravanas de comerciantes traen sus productos para negociar en el pueblo y algunos de ellos deciden establecerse en el lugar.
Un ejemplo de ellos es el tendedero que vendía carne asada en el centro del pueblo.
Regresando a barrera de la guardia, Crow escuchó que un hombre lo llamaba por detrás.
Al girarse, pudo ver al hombre que le había regalado una pieza de carne.
-Ahora entiendo lo que me dijiste la esa vez, te entendí mal-
El hombre mayor, al ver la sinceridad del joven, le extendió otra pieza de carne mientras negaba con la cabeza.
-Es normal, no te preocupes por eso. Toma esta pieza de carne y regresa con tu grupo, otro día podremos conversar-
Agradecido, el joven termino de comer la pieza de carne y se presentó ante la guardia.
-El entrenamiento ya terminó, en este momento los equipos están patrullando el exterior-
El soldado a cargo del entrenamiento de la guardia era casi de la misma edad que el tendedero, en su cuerpo se podían ver cicatrices de batallas pasadas y la falta de una parte de su oreja derecha.
Pensando en cómo un soldado que había pasado por muchas batallas aún no recuperaba su nombre, Crow solo imaginaba su oscuro futuro.
Revisando una lista en sus manos, el soldado miró al joven un momento antes de sacar un libro entre su ropa.
-Según la capitana no conoces bien la magia de vida, usa este libro para que aprendas todo lo necesario y cuando lo termines regresamelo-
Después de recibir el libro, Crow fue enviado hacia su casa con el aviso de que al día siguiente le asignaran un equipo.Magia de vida, está fue la magia necesaria para poder usar la mayoría de artefactos o circuitos mágicos en las casas.
-Así que necesitaba esto-
Leyendo el libro, Crow entendió como funcionaba la gema que le entregó Leaf.
Las gemas era refinadas de un mineral llamado ficorita, estos minerales tenían la capacidad de recolectar las partículas de magia en su interior y sus minas eran muy codiciadas por todos los reinos.
Las gemas de ficorita eran necesarias para activar los circuitos de luz en la casa, además estas gemas tenían diferentes niveles de fuerza. Las débiles eran usadas para la vida diaria, las de calidad media eran necesarias para activar algunos medios de transporte y las más fuertes eran usadas en las armas del ejército cuando se realizaban expediciones.
Actualmente, Crow no tenía nada de oro para comprar algunas de ellas, por eso él estaba buscando realizar algún trabajo para conseguirlo.
En el reino, la moneda básica era la de cobre, donde con diez de ellas podías comprar la mayoría de los frutos de las tiendas. Una moneda de plata equivalía a cien monedas de cobre y una moneda de oro equivalía a cien de plata.
En el libro también explicaba los conceptos básicos de la magia.
Los habitantes del continente de Aios desde que nacen se ven expuestos a las partículas magicas, si uno tenía mala afinidad con la magia estaba expuesto que las partículas mágicas, almacenadas en su cuerpo, perdieran el control provocando que todo su cuerpo explotara.
Para aprender más usos de la magia, Crow solo pudo esperar pedirle ayuda a Leaf para que le enseñara.
Mirando hacia la barrera de la guardia, el joven se sorprendió al ver que una columna de humo se elevaba en la distancia.
Sin pensarlo, avanzo hacia el puesto de guardia para preguntar que pasaba.
Al llegar a la barrera, varios equipos de la guardia habían regresado.
Los rostros de la mayoría estaba serio y algunos de ellos tenían manchas de sangre en su armadura.
Al mirar al soldado a cargo, encontró que estaba al lado de Aisha informándole lo ocurrido.
El rostro de Aisha cambiaba de una apariencia calmada a una de preocupación cada vez que escuchaba las palabras del soldado.Levantando su espada, Aisha se paró frente a los equipos mientras daba sus órdenes.
-El equipo dos ha sido emboscado por un grupo de bestias desconocidas, para asistirlos formaremos tres equipos de rescate y un equipo de exploración.
Tienen diez minutos para preparar sus cosas antes de partir, retirense-
Cuando los soldados se fueron a sus hogares, Crow se acercó a Aisha y le pidió que le permitiera participar en el equipo de exploración.
-Estas seguro de eso, como primera misión seria mejor que participaras con los equipos de rescate, así podrías observar como trabajan los soldados-
Al mismo tiempo que decía esas palabras, Aisha miraba el rostro de Crow, que había cambiado mucho al cortarse su barba y un pensamiento extraño recorrió su mente.
-Tengo más confianza moviéndome entre los árboles-
Mirando la convicción con la que decía esas palabras, Aisha lo pensó por un momento antes de aceptar su petición y entregarle una bolsa llena de herramientas para confundir a las bestias.
-Puedes ir con el equipo de exploración, pero no te separes del collar, entendido?-
Después de despedirse de Aisha, Crow le entregó el libro al soldado y le agradeció por la ayuda.
Después de diez minutos, los tres equipos de rescate salieron del poblado manteniendo el orden en todo momento.
Los exploradores, aparte de avisar sobre la posición de posibles enemigos, tenían que marcar el camino y dejar trampas en caso de que los equipos tengan que retirarse.
La columna de humo estaba a más de diez kilómetros del poblado, en ese sector habían varias cuevas ocupadas por bestias de gran tamaño que podrían presentar problemas al grupo.
Entre los árboles, Crow se sorprendió al ver que Aisha pertenecía al equipo de exploración. Después de que salieron del pueblo, él trató de ver donde estaba Aisha, pero no pudo encontrar rastro de ella.
Al otro lado de la columna de humo, el equipo dos había tomado resguardo en una cueva y mantenía el cuidado de los heridos mientras una parte del grupo estaba encargado de repeler los ataques de las bestias.
El grupo había perdido a cinco de sus miembros por una emboscada realizada por lagartos cornudos que liberaban veneno en cada una de sus mordidas.
Las criaturas actuaban de forma ordenada, cada vez que un elfo oscuro quedaba rezagado, dos lagartos lo rodeaban y buscaban quitarle la vida en el menor tiempo posible antes de continuar la persecución del grupo.
Cuando encontraron la cueva, el equipo dos decidió usarla como refugio y bloquear la entrada aprovechando que era muy pequeña.
Los lagartos cornudos al ver que solo uno de ellos podía ingresar por la abertura, dejaron solo algunos lagartos encargados de hostigar a los elfos oscuros mientras los demás escababan un agujero para sacar a sus presas.
Después de una hora, los equipo de exploración llegaron a la ubicación de la columna de humo.
Acercándose, Crow pudo ver que el origen del humo se encontraba en varias esferas marrones parecidas a las que le entregó Aisha.
Sin esperar que todos estuvieran reunidos, de entre los árboles se escuchó la voz de Aisha.
-El equipo dos debe estar cerca, si ven algo que deba ser informado regresen como primera prioridad, no regalen su vida en vano-
Terminando esas palabras, todos pudieron ver la silueta de Aisha saltar entre los árboles. No queriéndose quedar atrás, los exploradores avanzaron en diferentes direcciones buscando rastros del equipo dos.
Con el pasar del tiempo, los cuerpos de los cinco miembros asesinados aparecieron en el camino y fueron reportados al equipo de rescate.
En un trabajo conjunto, una de las exploradores encontró a un grupo de lagartos sacando tierra y rocas de un agujero.
Sin arriesgarse, la joven intentó retirarse, pero Aisha apareció a su lado y poniendo su mano delante de su boca le indicó que se mantuviera en silencio.
-Ya nos detectaron, si queremos salir de su rango de ataque, debes hacer caso a lo que te diga-
La chica, aunque era mayor y tenía una mejor figura que la de Aisha, respetaba mucho a su capitana, asintiendo escuchó las instrucciones de ella y se mantuvo.
Entre los lagartos cornudos, una pequeña criatura cubierta por una capa se escondía de la vista de los demás.
Cada vez que algo sucedía, esta criatura daba nuevas órdenes a los lagartos mientras vigilaba que no se vieran rodeados.
Levantando las manos, ocho lagartos siguieron las órdenes de la criatura y atacaron en dirección de las dos mujeres.
-Ahora, liberalas-
Ambas mujeres tiraron las bombas de humo marrón y se cubrieron con una manta envuelta en polvo blanco.
Luego de que las explosiones terminaran y se levantara una columna de humo, los lagartos intentaron perseguir a las mujeres, pero cuando trataron de seguir su rastro no pudieron encontrar nada.
La criatura, al ver que había sido engañado, levanto sus manos revelando un cetro lleno de calaveras, concentrando su energía empezó a cantar un hechizo de detección.
Cuando las mujeres escucharon el lenguaje que usaba la criatura, se sintieron aterrorizadas y trataron de no hacer ruido.
En la academia del ejército, les habían enseñado muchos tipos de lenguas usadas por las razas, pero después de muchos años solo pudieron recordar las usadas por las razas más peligrosas.
-Trasgos-
Aisha no pudo evitar alzar su voz cuando dijo esas palabras, la aparición de trasgos significaba que un nuevo rey Goblin había aparecido.
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Guerras bajo la niebla
Ciencia FicciónSven nunca imagino que entraría en un mundo donde el más fuerte tiene la razón y solo aquellos que vuelven del campo de batalla lo obtienen todo, siempre que no sean derrotados.