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Erick

Entro a la aula de mi primer clase y me siento hasta atrás, no me siento con muchos ánimos de hablar con alguien o que muchas personas me rodeen.

Mi mente vuelve a lo mismo de hace dos días, no sé como actuar ante esa situación. Ya se que tengo que hablar con Joel sobre eso, pero ni a él lo quiero ver, no me siento listo.

Muchas personas de la escuela me "advirtieron" sobre Joel, pero no les quise hacer caso. Supuse que lo conocía perfectamente después de tener múltiples citas estos meses. Pero ya veo que no.

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~Erick, te recomiendo que no te ilusiones mucho con él"~ le dijo una de sus compañeras un tiempo atrás~ escuché que no anda en muy buenos pasos.

~Y ¿como sabes que es cierto o no? Tú lo has dicho, solo escuchaste ~le respondió a la defensiva~

~Bueno, tienes razón, pero acaso ya te dijo que tiene un hijo y fue casado ~lo único que hizo el ojiverde fue reírse de sus palabras~

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-Soy un tonto -dice en un susurro y se recuesta sobre sus manos que se encuentran en su pupitre-

Lo ha estado evitando desde ese día, ni siquiera le responde los mensajes, siente que está siendo muy inmaduro de su parte, pero le duele que no le haya contado nada sobre su hijo. No le molesta que tenga un hijo, eso no es su molestia, si no que otras personas le tuvieron que decir sobre algo que él mismo tenía que habérselo comentado.

Y si sobre qué anda en malos pasos ¿también es cierto? No, no por favor no.

Cuando levanta la cabeza, varios de sus compañeros ya se encuentra sentados, en ese momento llega la maestra.

-Buenos días chicos -saluda caminando hacia su escritorio- saquen su libro y ubíquense en la página 83 por favor...

Unos toques en la puerta se escuchan por todo el salón, la mayoría no le prestamos atención y buscamos la pagina que dijo la maestra.

-Disculpe la interrupción maestra, ¿pero se encuentra Erick? -volteo rápidamente hacia la puerta al escuchar esa voz-

La maestra voltea y recorre a todos hasta que me encuentra.

-Sí se encuentra -le dice con una sonrisa-

-¿Podría salir un momento por favor?

-¿Quién, Erick o yo? -le responde la maestra con un toque de voz divertido-

Se escuchan varias risas por el salón. La maestra es así, si no haces una pregunta bien, no te responde a cómo debe de ser.

-Erick, maestra, necesito hablar con él, por favor.

-Esta bien, solo unos minutos -voltea a verme- Erick, te hablan.

Deja la puerta abierta y camina nuevamente hacia el Pizarrón, me levantó lentamente de mi lugar y camino hasta la puerta. Siento que mis rodillas se doblan de los nervios cuando por fin de dos días lo veo.

-Hola -dice por fin cuando ya estamos afuera y alejados del salón-

-Hola -le respondo lentamente-

-¿Por que ma has estado evitando, Er?

Lo veo a los ojos, antes de responderle.

-¿Tú por que crees?

Veo como pasa saliva y camina nervioso a la baranda.








Bonito día ❤️

¡No es mío! || JoerickDonde viven las historias. Descúbrelo ahora