Franchesca.
•Como fue que dormí tanto este día de hoy, jamás lo hubiera hecho.
Me acerco a la ventana y la abro, para ver la calle y su trayecto de la tarde, pero no se primero fui a lavarme los dientes, luego un rico baño y voy a mirar la calle desde mi habitación, al abrirla me encuentro con una sorpresa..
•Ese es José? (Me pregunto a mi misma) pero que hará ahí?
Bueno aun sigo en la ventana mirando a José el amor de mi vida, yo loca por bajar y sentarme a su lado y conversar con el, pero no soy masoquista así que mejor me quedo a observarlo desde aquí. Unos minutos después miro que se pone de pie y se queda parado.
•Me pregunto a mi misma- que estará planeando José, que tiempo lleva por el mismo estilo.
Ya me dio hambre y bajo hasta la cocina a buscar corn flakes con leche y chocolate y regreso al mismo lugar donde estoy observando a José... Solo me pregunto ¿Que hace? Pero en fin me importa poco, espero que no piense que yo salga y vaya con el hasta aya fuera...
Minutos más tarde.
•Ooossh ya no puedo más, iré hasta donde él está.
Bajo la escaleras corriendo, cuando abro la puerta al mismo tiempo él va a tocar el timbre y me pregunta con su cara de inocencia.
•Ahora si puedo pasar?
Pero el orgullo que tengo y a la vez estoy nerviosa por tenerlo a mi frente, es que lo amo tanto.
•Para que?
•No me respondas una pregunta con otra pregunta... Puedo pasara?
•Si, claro y toma asiento.
•Muchas gracias...
•No hay porque (mientras cierro la puerta tras de mi) dime que quieres?
•Pedirte perdón!
•Pedirme perdón?
•Si.
•José que diablos crees que soy?
Jajajajajaja si habrían visto su cara como la puso, como un perro asustado sin salida alguna.
•No creo nada, solo vine a pedir disculpas por el daño que te he hecho.
•José, lo que hiciste fue un descaro.
•Si, ya se que hice mal con besar a Fabiola.
Wow me dio una puñalada en el corazón, recordándome eso pero a mi nadie me mando a recordarle eso, pero lo escuchare mientras me siento.
•Pero solo te diré esto, no me ruegues, que no quiero nada contigo.
•Franchesca espera no vine a rogarte.
•(Wow nadie me manda a ser así) esta bien José, vete... pensé que vendrías aquí a pedirme una oportunidad maldición.
•Pero me perdonas?
•Si, pero vete de mi casa ahora.
•Una cosa más...
•(enojada y triste, furiosa y melancólica) que te vayas maldición, no quiero escucharte.
•Pero!
•Que te vaya.
•Ok, me voy.
•José!
•Dime?
•Recuerda que siempre te amare.
•Lo siento Franchesca (mientras cierra la puerta y se marcha)
Que idiota soy yo, como me adelanto a las cosas y decirle a el que no me ruegue, porque yo no se a que el vino hasta aquí, que estúpida... algo corriendo hasta la calle y ya el se había marchado.
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De la tristeza a la felicidad.
RomansYa a partir de los próximos días Jose inicia a conocer la felicidad, pero como dicen por ahí, la felicidad del pobre dura poco, vamos a observar lo feliz que será Jose en los próximos días.