Tu eres Lo Correcto-Jenlisa y ChaessoG!P

Lo hice por ti [Cap 23]

Pov- Lisa

Al salir de la ducha, sacudo mi cabeza un poco, consiguiendo que unas pocas gotas de agua en todo mi pelo, se quiten de mí.

Entonces, camino lentamente a la cama de Jennie y secando mi cabello húmedo en el acto, gracias a la pequeña toalla que pude agarrar y elegir de mi armario en uno de mis cajones, lo consigo pero lo hago torpemente - bien, se sintió muy bien - digo con pereza, levantando mi cabeza para mirar el techo y mis hombros se relajan, por la técnica empleada.

Fue una ducha reconfortante.

Lo fue.

Observo las sábanas listas y blancas de mi cama y mi cuerpo arde en deseo por meterse en ellas, entonces cuando termino de colocarme los boxers y mi pijama.

Camino sintiendo mis pisadas un poco pesadas y subo de rodillas en esta, empezando a gatear en ella como un gatito que busca la mejor posición, mientras supongo que Jennie sigue descansando, ella se veía tan linda hace rato cuando estuve en mi habitación que por ahora ocupa, sus labios suaves y perfectos pronunciando mi nombre estando aún dormida.

Ella es perfecta.

Diablos, pensar en ella así, no es bueno.

Para nada lo es, pero no lo puedo evitar.

¿Quien podría? 

Tú podrías?

El sedante que me dió el doctor que la atendió en el hospital, es muy efectivo y hoy solo quiero descansar, no pensar en nada, nada.

Me lo merezco, porque después tendré que hablar con ella y supongo, que nuestra charla será agotadora.

Muy agotadora.

Aunque, debo de admitir que tengo un poco de miedo, no de Jennie, claro que no, solo y únicamente de su reacción. 

Y estaba tan sumergida en mis pensamientos, ya acomodándome en mi camita, que cuando regresé de ellos, un golpe ensordecedor proveniente de mi habitación, me hizo entrar en alerta y salir de la cama muy rápido, apresurando el paso para quedarme de pie observando la puerta contraria, siendo golpeada con fuerza.

Alguien estaba enojada, muy enojada y obviamente, yo temblaba de miedo.

Abre la maldita puerta, Lisa! - trago saliva un poco asustada al escuchar su voz llena de furia incontenible y niego con la cabeza sabiendo que ella no me puede ver, por obvias razones, claro - tu maldito sedante no hizo nada en mí, ahora sácame de aquí! - grita aún más fuerte y aún más enojada.

Sé muy bien, que lo que hago, no es bueno.

Pero si la dejo ir, le pueden ocurrir muchas más cosas feas y eso, es lo último que quiero.

Entonces, a paso lento, muy lento, camino a la puerta de mi habitación y me detengo, observándola un poco mientras la toco - Jennie.. - susurro su nombre con suavidad, queriendo que escuche mis palabras a través de la madera gruesa, pero su repentino llanto me golpea de manera dura.

De manera realista, de manera cruda y odio mucho todo lo que está pasando entre nosotras.. pero, no puedo.

No puedo dejarla ir.

Estás reteniéndome aquí en mi contra y odio todo esto Lisa.. lo odio, te odio! - golpeo mi frente duramente con la puerta arrepentida y decido abrirla con rapidez, para poder consolarla.

No soporto la idea de que se sienta mal.

No debí hacerlo.

Mala decisión amigos.